Lima.– El expresidente peruano Alberto Fujimori, preso por una condena a 25 años de cárcel, expresó hoy que solo muriendo o siendo un enfermo terminal podría salir en libertad, al participar en el debate sobre un eventual indulto o ley que le permita cumplir la sentencia en casa.
“Me preocupa el riesgo latente que corro en cárcel de sufrir isquemia, infarto cerebral y hemiplejia por las continuas crisis hipertensivas”, escribió Fujimori en su cuenta en Twitter tras comentar unas dolencias que tuvo el viernes pasado.
El expresidente (1990-2000) añadió que “mientras muchos opinan… la única realidad es que solo muriendo o estando en fase terminal podría salir en libertad». El mandatario peruano, Pedro Pablo Kuczynski, reiteró el pasado viernes su posición de aprobar una eventual ley dada por el Congreso para beneficiar con el arresto domiciliario a los presos adultos mayores.
El congresista Roberto Vieira presentó a fines de abril un proyecto para que los presos mayores de 75 años cumplan su condena bajo un régimen de prisión domiciliaria, pero el fujimorismo, con mayoría absoluta en el Congreso, anunció que no apoyará la iniciativa porque prefiere el indulto para el expresidente.
Sin embargo, la ministra peruana de Justicia y Derechos Humanos, María Soledad Pérez Tello, señaló que Fujimori fue condenado por delitos de lesa humanidad y consideró que la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH) determinaría que el indulto es una estratagema para eludir la acción de la Justicia. En declaraciones a RPP Noticias, la titular del Congreso, la fujimorista Luz Salgado, opinó hoy que el exmandatario “está mal y lo que debería haber es la voluntad política de darle un indulto».
“Yo me pregunto si el presidente no tiene la decisión para el indulto por qué sus principales líderes han promovido este tema”, agregó Salgado después de que el legislador oficialista Carlos Bruce se pronunció a favor de la excarcelación de Fujimori.
Sobre el proyecto de ley presentado por Vieira, Salgado dijo que no se pueden dar leyes con nombre propio y lamentó que se generen expectativas infundadas. Fujimori, de 78 años, es trasladado periódicamente desde su celda a clínicas de Lima para recibir tratamiento por algunos males crónicos que padece, como una hernia, hipertensión, gastritis y unas lesiones en la lengua, conocidas como leucoplasia, de las que fue operado hasta en seis ocasiones.
El expresidente cumple desde 2009 una condenado a 25 años de prisión por la matanza de Barrios Altos (1991) y La Cantuta (1992), donde murieron 25 personas a manos del grupo militar encubierto Colina, y por los secuestros del empresario Samuel Dyer y del periodista Gustavo Gorriti, después del autogolpe de Estado que dio el 5 de abril de 1992.
El indulto humanitario ya fue rechazado por el expresidente Ollanta Humala (2011-2016) en 2013, tras una solicitud de los hijos de Fujimori, entre ellos Keiko Fujimori, actual líder de Fuerza Popular, en la que esgrimían un delicado estado de salud de su padre.