El jurista y ex regidor de Santo Domingo Este, Manuel Soto Lara, aseguró que el alcalde Manuel Jiménez generó una crisis en el municipio por atreverse a romper con la tradición de los alcaldes de asociarse y beneficiarse de las mafias que hacen negocio con el servicio municipal de recogida de basura.

Al ser entrevistado en el programa Políticas Nuevas de la plataforma Nuevo Diario, Soto Lara afirmó que en los grandes municipios la tradición de los últimos años ha sido la asociación de los alcaldes con los empresarios de la basura que por lo regular son personas relacionadas con el narcotráfico y que no tienen ningún tipo de conocimiento ni experiencia gerencial.

“La crisis que tiene nuestro municipio, en parte, es la consecuencia de esa transición, porque las transiciones siempre generan ese tipo de situaciones. Ese comportamiento del actual alcalde, que ha renunciado a meterse en el negocio, en la mafia de la basura, y se ha fajado a recogerla, eso hay que apoyarlo”, declaró el jurista en la entrevista que le hicieran los comunicadores José Paulino, Vladimir Henríquez y Nicole Paulino.

Para Soto Lara con la adquisición de camiones que permitan al Ayuntamiento prestar el servicio de manera directa en zonas clave la ciudad y los munícipes salen ganando, porque la privatización, a su juicio, suele ser una estrategia de los alcaldes de turno para entrar a formar parte del negocio.

“Es tan rentable el negocio que empresarios que le estaban pagando el 30 y el 25 por ciento de lo que estaban facturando al mes defendían ese contrato a uña y diente, porque pagándole el 30 por ciento de lo que facturaban cubrían las operaciones. Estamos diciendo que el 70 por ciento era ganancia. ¿Y cómo se puede mantener un contrato de basura o servicio tan oneroso para la comunidad?”, reflexiona el abogado.

Cambios en proceso

Manuel Soto Lara sostiene que el alcalde de Santo Domingo Este terminará de manera exitosa su lucha contra la mafia de la basura porque el dinero que comenzó a ahorrarle a la ciudad con la compra de camiones le permitirá aumentar la capacidad de servicio y dirigir el ahorro hacia áreas estratégicas.

Según él, el caso de Jiménez debe ser imitado por los demás alcaldes de grandes municipios, debido a que la basura privatizada se lleva hasta el 35% de todo el presupuesto de las gestiones locales.