Estafadores llamaron a envejecientes estadounidenses haciéndose pasar por abogados para robar dinero
WASHINGTON – Dos residentes en la provincia Santiago de los Caballeros fueron extraditados a los Estados Unidos la semana pasada y comparecieron el pasado martes por primera vez ante el tribunal federal de Newark, por cargos relacionados con su participación en una extensa “estafa a adultos mayores” que defraudó a envejecientes estadounidenses por millones de dólares.
Rafael Ambiorix Rodríguez Guzmán, también conocido como Max Morgan, de 59 años, y Félix Samuel Reynoso Ventura, también conocido como “Fili” y “Filly The Kid”, de 37 años, son parte de 11 dominicanos imputados en una acusación formal de 19 cargos, presentada en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito de Nueva Jersey, la cual fue revelada el 29 de abril. Después de su primera comparecencia ayer, el tribunal ordenó la detención de ambos hombres en espera del juicio.
Según la acusación, Rodríguez Guzmán, Reynoso Ventura y sus co-conspiradores participaron en una prolongada estafa a “abuelos” o “familia necesitada de fianza” contra cientos de adultos mayores en todo el territorio de los Estados Unidos, incluidos Nueva Jersey, Nueva York, Pensilvania y Massachusetts. Se alega que tanto Rodríguez Guzmán como Reynoso Ventura trabajaron en los centros de llamadas en la República Dominicana desde donde operaba la estafa, llamando a envejecientes estadounidenses y buscando robar su dinero.
Según lo detallado en los documentos judiciales, los miembros de la conspiración, conocidos como “abridores”, llamaban a las víctimas en los Estados Unidos y se hacían pasar por los hijos, nietos u otros parientes cercanos de las víctimas. Los centros de llamadas usaban tecnología para hacer parecer que las llamadas provenían desde dentro de los Estados Unidos. Por lo general, a la víctima se le decía que su nieto había tenido un accidente automovilístico, había sido arrestado en relación con un accidente y necesitaba ayuda.
Una vez que los abridores engañaban a las víctimas haciéndoles creer que sus seres queridos estaban en grave peligro, otros que trabajaban en los centros de llamadas, conocidos como “cerradores” —incluidos Rodríguez Guzmán y Reynoso Ventura— supuestamente se hacían pasar por abogados defensores, oficiales de policía o personal judicial y convencían a las víctimas de proporcionar miles de dólares en efectivo para ayudar a sus seres queridos. El efectivo generalmente era recogido por mensajeros enviados a las casas de las víctimas o enviado por correo por las víctimas bajo la dirección de los cerradores.
Rodríguez Guzmán y Reynoso Ventura enfrentan múltiples cargos, incluyendo conspiración para cometer fraude postal y electrónico, fraude electrónico, fraude postal y conspiración para cometer lavado de dinero. Si son condenados, enfrentan una pena máxima de 20 años de prisión por cada cargo, una multa máxima de US$250,000 por cada cargo de fraude postal y electrónico, y una multa máxima de US$500,000 por conspiración para cometer lavado de dinero.
“La División de Protección al Consumidor del Departamento de Justicia y sus socios de las fuerzas del orden perseguirán vigorosamente a los criminales que defrauden a las víctimas mediante las llamadas ‘estafas a abuelos’”, dijo el subsecretario principal de Justicia, Brian M. Boynton, jefe de la División Civil del Departamento de Justicia. “Continuaremos identificando a los perpetradores de estos esquemas y daremos prioridad a la búsqueda de aquellos que deliberadamente apunten a estadounidenses vulnerables desde el extranjero. Agradecemos al Gobierno de la República Dominicana por extraditar a estos acusados a los Estados Unidos para enfrentar los cargos”.
“Según lo alegado, estos dos acusados jugaron un papel en un esquema que se basó en el amor y la devoción de las víctimas envejecientes para estafarlas con millones de dólares”, dijo el fiscal estadounidense para el Distrito de Nueva Jersey, Philip R. Sellinger. “En esta ‘estafa a abuelos’, algunos de los acusados supuestamente se hicieron pasar por nietos en apuros, afirmando, por ejemplo, que habían sido arrestados después de un accidente automovilístico que involucraba a una mujer embarazada que luego abortó, y necesitaban dinero inmediato para la fianza o un abogado. Conspiradores como Rodríguez Guzmán y Reynoso Ventura, supuestamente se hicieron pasar por varias personas –oficiales de policía, abogados y otros– para convencer a las víctimas de pagar, lo cual los adultos mayores, angustiados, hicieron a menudo. Mi oficina está comprometida con proteger los derechos de todas las víctimas, y perseguiremos implacablemente a aquellos que supuestamente apunten a ancianos vulnerables para robar sus ahorros ganados con esfuerzo”.
“Estos acusados y sus co-conspiradores son acusados de robar despiadadamente a innumerables víctimas envejecientes su valioso tiempo y, a menudo, sus ahorros de toda la vida, todo desde más de 1,500 millas de distancia”, dijo Iván J. arvelo, agente especial a cargo de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) Nueva York. “Rafael Ambiorix Rodríguez Guzmán y Félix Samuel Reynoso Ventura estaban entre las 16 personas acusadas en este espantoso esquema, que abarcó al menos cuatro estados de los EE.UU. y supuestamente amenazó los medios de vida de cientos de estadounidenses inocentes. La avaricia despiadada de los perpetradores no tiene límites, pero no es rival para la Fuerza de Tarea El Dorado de HSI Nueva York, su Grupo de Intrusión Cibernética y la comunidad más amplia de las fuerzas del orden. Estoy orgulloso de estar al lado de nuestros socios globales en nuestro compromiso implacable con la seguridad y el bienestar general del público vulnerable».
“La estafa a los abuelos es un esquema de fraude cruel que deliberadamente se aprovecha de personas envejecientes y vulnerables dentro de la sociedad. Los perpetradores, que a menudo operan cobardemente desde el extranjero, causan un daño emocional y financiero extremo a las personas inocentes que apuntan en la comisión de este delito”, dijo Bradley Parker, agente especial interino de la Oficina del Inspector General de la Administración del Seguro Social (SSA-OIG) de la División de Campo de Boston Nueva York. “SSA OIG se unió orgullosamente a HSI, el FBI, el Departamento de Justicia y el NYPD en la investigación de estas estafas internacionales complejas dirigidas a defraudar a los beneficiarios de la SSA y apreciamos la diligencia del Servicio de Alguaciles de los EE.UU. en facilitar la extradición de estos acusados desde la República Dominicana a Nueva Jersey para responsabilizarlos por sus acciones”.
“Estamos ahora un paso más cerca de responsabilizar a los presuntos estafadores que explotaron financieramente a cientos de ancianos estadounidenses”, dijo el comisionado Edward A. Caban, del Departamento de Policía de la ciudad de Nueva York (NYPD). “Esto debe servir como recordatorio a otros criminales sobre el alcance extenso de las fuerzas del orden de Nueva York y nuestro compromiso inquebrantable de impartir justicia a todas las víctimas. Aplaudo a nuestros investigadores del NYPD y a todos nuestros socios federales por su dedicación a este importante caso”.
HSI, SSA-OIG, NYPD y el FBI están investigando el caso. La Oficina de Asuntos Internacionales del Departamento de Justicia brindó asistencia significativa para asegurar el arresto y la extradición desde la República Dominicana de los acusados con la asistencia del Servicio de Alguaciles de los Estados Unidos. Los funcionarios del Departamento de Justicia también reconocieron la cooperación crítica del Gobierno dominicano para llevar a cabo la extradición de Rodríguez Guzmán y Reynoso Ventura, de acuerdo con el tratado entre los dos países.
Los abogados de juicio, Jason Feldman, Joshua Ferrentino y Emily Powers, de la División Civil de la Rama de Protección al Consumidor y la asistente del fiscal para el Distrito de Jersey, Carolyn Silane, están procesando el caso.
Si usted o algún conocido tiene 60 años o más y ha experimentado fraude financiero, hay profesionales experimentados disponibles en la Línea Directa Nacional de Fraude a Personas Mayores al 1-833-FRAUD-11 (1-833-372-8311). Esta línea directa del Departamento de Justicia, gestionada por la Oficina para Víctimas del Delito, puede proporcionar apoyo personalizado a las personas evaluando las necesidades de la víctima e identificando los próximos pasos relevantes. Denunciar es el primer paso. Denunciar puede ayudar a las autoridades a identificar a quienes cometen fraude. Denunciar ciertas pérdidas financieras debido al fraude lo antes posible, puede aumentar la probabilidad de recuperar las pérdidas. La línea directa está abierta de lunes a viernes de 10:00 a.m. a 6:00 p.m. ET. Se dispone de inglés, español y otros idiomas.
Más información sobre los esfuerzos del departamento para ayudar a los adultos mayores estadounidenses está disponible en su página web de la Iniciativa de Justicia para los Ancianos. Para más información sobre la Rama de Protección al Consumidor y sus esfuerzos de aplicación, visite www.justice.gov/civil/consumer-protection-branch. Las quejas de fraude a envejecientes pueden ser presentadas ante la FTC en www.reportfraud.ftc.gov/ o al 877-FTC-HELP. El Departamento de Justicia proporciona una variedad de recursos relacionados con la victimización por fraude a ancianos a través de su Oficina para Víctimas del Delito, que se puede consultar en www.ovc.gov.
Una acusación formal es simplemente una alegación. Todos los acusados se presumen inocentes hasta que se pruebe su culpabilidad más allá de una duda razonable en un tribunal de justicia.