El ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, consideró ayer que en Haití no hay condiciones para continuar el proceso de reuniones periódicas iniciadas un año atrás por ambos países, en procura de fortalecer las relaciones y organizar aspectos comunes.

Aunque aclaró que se trata de una percepción muy personal, Fadul dijo que el clima de protestas y de pedidos sociales para que el presidente Michel Martelly abandone el poder, mantienen un clima de inestabilidad que torna imposible la realización de reuniones de ese tipo.

“Mira ahora mismo con la situación del consulado allá. Teníamos que llamar al canciller, y no hay canciller, es muy difícil la situación”, expresó Fadul.

Precisamente un día como ayer entre ambos países se realizó la primera reunión bilateral de alto nivel, en Haití.

Luego, aunque con interrupciones en medio, se realizaron otras tres de ese tipo, y tres de las comisiones conformadas. Para esta fecha se había hablado de otro encuentro, pero la situación lo impide.

“Hay mucha inestabilidad, hay muchas protestas. En este momento no hay estabilidad gubernamental, yo no creo que haya condiciones, es una apreciación mía muy personal”, insisitió Fadul.

Sin embargo, de manera oficial no se ha comunicado nada respecto de los encuentros y los asuntos pendientes, tanto de las comisiones como de la agenda binacional que, del lado haitiano, encabezaba el exprimer ministro Lauren Lamothe, quien dimitió a su cargo por las presiones políticas.

Sobre poblado Puerto Plata. En otro orden, Fadul dijo que a primeras horas de hoy una comisión de Interior y Policía se trasladará a la comunidad ‘Los Algodones’ o ‘Villa Esperanza’ para realizar un levantamiento sobre la población de inmigrantes haitianos que residen allí.

Dijo que verán su status migratorio y si están en proceso de regularizar su situación.

Explicó que en Puerto Plata hay un centro de regularización por lo que exhortó a todas aquellas entidades que quieran protegerlos a incentivarlos a regularizar su situación y así evitar que sean trasladados a sus países de origen tan pronto concluyan los plazos establecidos para los procesos de Naturalización y Regularización.

Control de bebidas. El ministro también se refirió a las críticas a la apertura para la venta de bebidas alcohólicas en las fiestas de Navidad y fin de año, y consideró que hay que flexibilizar en esas ocasiones.

Aseguró que es partidario de los controles y que por ello llama la atención del Congreso Nacional para que dé curso a un proyecto de ley que instrumentaron en ese sentido. Consideró que los legisladores deberían hacer las consideraciones que entiendan, pero aprobarla para que el control tenga más peso.