MILÁN.— El director cinematográfico Vittorio Taviani, quien con su hermano Paolo creó obras maestras del cine italiano que obtuvieron importantes premios en los festivales de Cannes y Berlín, ha muerto. Tenía 88 años.
El presidente italiano Sergio Mattarella dijo en un comunicado que la muerte de Taviani el domingo en Roma tras una larga enfermedad “es una gran pérdida para el cine y la cultura italianas, que se quedan sin un protagonista innegable y amado”.
Los hermanos Taviani tenían poco más de 80 años cuando ganaron el Oso de Oro en el Festival Cinematográfico de Berlín en 2012 por el documental “César debe morir”, el cual mostraba a reos de una prisión de alta seguridad que montaron la tragedia de Shakespeare. En esa época, Taviani dijo que él y su hermano querían recordarle a las audiencias que “incluso un reo, sobre cuya cabeza pende un terrible castigo, es, y sigue siendo, un hombre”.
Alcanzaron su primer éxito en 1977 cuando obtuvieron la Palma de Oro en Cannes por su cinta “Padre padrone”, la cual versa sobre un pastor en Cerdeña que procuró adquirir una educación para escapar de su padre dominante. Los hermanos se toparon por primera vez con esa historia de la vida real en un artículo periodístico y luego un libro.
“De inmediato nos pareció una historia hermosa, una historia para realizar”, dijo Taviani alguna vez. “Nos sentimos unidos a esta historia”.
Los hermanos se alternaron en la dirección de escenas a lo largo de su carrera de 50 años, proceso en el que obtuvieron docenas de premios. Su última cinta, en 2017, llevaba como título “Una questione privata” (Un asunto privado). Presentaba los créditos de ambos pero fue dirigida sólo por Paolo debido a los problemas de salud de Vittorio, según el periódico Corriere della Sera.