SAN CRISTÓBAL. En este municipio, la causa de que una gran cantidad de pobladores barriales carezcan de agua potable es que más de 3,600 averías en las redes de los dos acueductos (el viejo y el nuevo) son reparadas de manera artesanal y por insuficiencia de recursos de los organismos encargados.
Esta situación se expresa en los barrios en una enorme fuga de agua que dificulta el abastecimiento.
La situación de crisis en el abastecimiento de agua en esta población es confirmada por una investigación realizada por la Fundación para la Educación en Población y Medio Ambiente (FEPMA, Inc).
Las conclusiones de este estudio puntualizan que en las principales calles de esta ciudad hay un gran desperdicio de agua potable, como consecuencia de las fugas en las redes de los acueductos locales.
El estudio cita grandes averías en la avenida Constitución y Libertad; en las calles General Cabral, Bernardo Alíes y Proyecto, del barrio Los Nova, así como en las María Trinidad Sánchez, 27 de Febrero y Capotillo, entre otras.
La investigación realizada por la FEPMA indica que en las tuberías provenientes del acueducto viejo hay centenares de pinches que provocan el derrame y desperdicio de miles de galones de agua potable.
En ese sentido, explica que se han detectado grandes fugas en los barrios Lava Pies, Pueblo Nuevo, Los Molina, 5 de Abril, La Guandulera, Conani, Narciso González, Villa Esperanza, Los Multis, El Cerro y Villa Mercedes, entre otros.
Indica que hay lugares donde el derramamiento y desperdicio de agua forman parte de la historia del municipio, y señala como ejemplo la avería en la calle Juan Pablo Duarte, entre las avenidas Máximo Gómez y Constitución.
La investigación responsabiliza de esta situación al método artesanal y negligente que se aplica en los trabajos de seguimiento de la oficina provincial del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados -INAPA-. A esto se añade que esa dependencia no recibe recursos económicos suficientes de parte de la sede central para trabajos más eficientes.
El presidente de la FEPMA, ingeniero Luis A. Casilla, explicó que en este municipio hay 105 barrios, y que en un 95 por ciento sus moradores enfrentan serias dificultades para adquirir agua potable permanente.
Según FEPMA, en cada uno de estos barrios se cuantifica al menos 30 escapes.
Casilla señala que las fallas en las instalaciones de los medidores constituye otra causa del desperdicio excesivo.
Refiriéndose a la importancia del agua para esta ciudad, la investigación señala que este recurso será el petróleo del futuro, pues su gran demanda y escasez la harán objeto de fuertes presiones sociales y económicas, generadoras de conflictos geopolíticos.
Da pena observar cómo, después de invertirse cerca de 2 mil millones de pesos en un nuevo acueducto, éste haya servido para provocar mayores desperdicios de agua potable, y a la vez inequidad en la distribución oportuna de este demandado recurso, expresa.
Cita la falta de agua potable en los barrios Conani, Villa Esperanza, Narciso González y los Multis, que están a menos de mil metros del nuevo acueducto.
En ese sentido, Casilla dice que la solución no es admitir los problemas existentes con el desabastecimiento y desperdicio de agua, sino resolverlos.
Las frases
Luis A. Casilla
En las tuberías provenientes del acueducto viejo hay centenares de pinches que provocan el derrame y desperdicio de miles de galones de agua potable.
Da pena observar cómo, después de invertirse cerca de 2 mil millones de pesos en un nuevo acueducto, éste haya servido para provocar mayores desperdicios de agua potable y, a la vez, inequidad en la distribución oportuna de este demandado recurso.
La solución no es admitir los problemas, sino tratar de resolverlos.