La falta de aulas, incremento de centros de diversión, de ventas y consumo de drogas, falta de fuentes de trabajo, irrespeto de los espacios públicos, así como la inseguridad, son de los principales problemas que afectan al barrio de Cristo Rey, en el Distrito Nacional.
Espacios de vital importancia para el sector y lugares aledaños, como Arroyo Hondo, La Agustina, el Parque Zoológico Nacional y otros, han sido convertido en basureros, paradas de minibuses y talleres.
Tal es el caso de la Rotonda, por donde baja una cañada natural, pero que su superficie ha sido invadida por talleres, y más que un área verde parece un cementerio de chatarras, sin que ninguna autoridad ponga costo a la situación.
El párroco de la iglesia San Pablo Apóstol, en La 40 de Cristo Rey, expresa que hasta tanto no se establezcan condiciones adecuadas para cientos de jóvenes la situación del sector seguirá empeorando.
Señala que desde el año pasado exigen al Gobierno la construcción de un politécnico debido al déficit de aulas que existe en la comunidad.
Revela que el alcalde del Distrito Nacional, David Collado, que en principio estuvo renuente a ceder partes de las instalaciones de lo que fue Talleres Cima, en la avenida Nicolás de Ovando, con José Ortega y Gasset, ya manifestó su disposición de desprenderse del 80% de la edificación para que se levante un politécnico, lo que es un gran paso.
Advierte que ahora quien tiene el juego trancado es el ministro de Educación, Andrés Navarro, con quien se reunió en agosto del año pasado y quien designó a su asistente Julio Santana para que continuara la búsqueda de espacio para un centro educativo.
“Pero el señor Julio Santana no ha servido para nada, no resuelve, no se comunica, no viene, no toma las llamadas, y al ministro no los hemos podido constatar nuevamente”, expresa.
Advierte que la próxima semana las organizaciones comunitarias del lugar podrían expresar su descontento con las autoridades, si en las próximas horas no hay respuesta sobre el particular. A la falta de aulas y de trabajo, agrega, sobran los colmadones, los juegos y puntos de drogas, lo que también conduce al robo y los atracos, ya que para mantener los vicios se necesita dinero.
Critica al comandante de la Policía Nacional del sector, coronel Porte Milané, de quien considera no debe estar en Cristo Rey, debido a que tiene muchos años en el lugar. “Al lado, en los alrededores de él está la droga, están los “tígueres”, la gente que vive en la calle El Retiro, donde está el destacamento, no se duerme”, expone.
Indica que el director de la PN, Ney Aldrin Bautista, estuvo en la parroquia en una cena, el pasado diciembre, no ha hecho nada a pesar de que hizo el mismo comentario sobre sus agentes en la zona.