La seguridad policial y penitenciaria en el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva es insuficiente para garantizar la vida a la cantidad de personas condenadas y descargadas diariamente por los jueces de los 18 tribunales que administran justicia. Tampoco las de los familiares de ellos.

Los policías no dan abasto para proteger a los victimarios y a la víctimas, y estas últimas deben agenciarse su propia forma de salir ilesas de las audiencias en que obtienen sentencias a su favor. Nunca hay agentes del orden que puedan acompañar a las víctimas a las afueras del edificio que también aloja a la Fiscalía del Distrito Nacional. Los policías apenas dan abasto para proteger a los acusados, por ser la parte llamada a cuidar en los procesos judiciales, según el Código Procesal Penal. Las personas que acuden a las causas porque sus parientes son juzgados por algún delito, tienen que buscar la forma de evitar se agredidos por los de la otra parte en el caso.  En los últimos tres meses han ocurrido tres pleitos en la Fiscalía del DN.

La clave

El primer enfrentamiento ocurrió en el  Primer Tribunal Colegiado,  por una sentencia de 20 años por un  homicida. En otro incidente, una italiana destruyó a pedradas los cristales de la parte frontal del edificio y antier se produjo el pleito de dos familias que dejó un saldo de tres heridos.