La falta de regulación es el principal factor que amenaza la sostenibilidad del sistema eléctrico, consideró el director ejecutivo de la Comisión Nacional de Energía (CNE), ingeniero Antonio Almonte Reynoso.

Dijo, además, que si el sistema eléctrico dominicano no se fortalece en la aplicación de la Ley General de Electricidad, «caminamos hacia el caos y eventualmente hacia una situación de desorden que le traerá graves consecuencias al gobierno». Resaltó que la gente percibe que es el Estado, el que en última instancia, tiene que garantizar el servicio eléctrico.

Según Almonte Reynoso, no hay posibilidad ninguna de que un sistema eléctrico pueda sobrevivir en un mercado, en ninguna parte del mundo, si no existe un ente regulador fuerte.

Añadió que cuando hay una débil regulación, cuando no se aplican la ley y los reglamentos de manera estricta y transparente, el Estado, que es al que le corresponde esa función, se ilegitima frente a los consumidores.

A su entender, si no se tiene un sistema suficientemente fuerte en la regulación, se puede expresar en debilidades y conflictos en el sector eléctrico.

Dijo que ha habido una debilidad importante en la regulación del sector eléctrico y que una fuerte estructura de regulación debe contar con un cuerpo de especialistas con suficiente autoridad legal e independencia, con respecto a los sectores públicos y privados y que opere con base a una ley y reglamentos que contribuyan a hacer que grandes empresas y los consumidores, cumplan con sus responsabilidades en el sistema.

Resaltó, además, que la regulación tiene un componente no solamente de normativa, sino fundamentalmente técnico-económico.

En ese sentido expresó que la Superintendencia de Electricidad, para aprobar aumentos de tarifas y para hacer determinados tipos de concesiones a las empresas, tiene que poseer un dominio e información acabada de cuáles son los costos reales operativos de todos los sectores de la economía en el negocio eléctrico.

La Superintendencia, sostuvo, debe estar en capacidad de inspeccionar la información que le suministran los generadores, distribuidores y las empresas de transmisión.

En base a ello, dicho organismo podría establecer cada cierto tiempo, tarifas que se correspondan con los costos reales, que les garanticen rentabilidad a las empresas y posibilidades de cubrir a los consumidores, dijo.