POR ARIDIO PERDOMO
PUERTO PLATA.- Los problemas básicos que confronta el sistema educativo público en la provincia de Puerto Plata se resumen en dos aspectos fundamentales: «la falta de butacas y de aulas suficientes para satisfacer la demanda de los alumnos».
Los casi 30 mil estudiantes que cursan estudios primarios, intermedio y secundarios en los nueve municipios que conforman la demarcación territorial de la provincia, confrontan serias dificultades para recibir la enseñanza pública.
La escuela «Ángel Sixto Bonilla», de nivel básico, con una matrícula de mil 200 estudiantes, de los cuales 650 son del género femenino y los restantes 500 son varones, que funciona en el antiguo local que ocupó hasta los años 60 la antigua Chocolatera Industrial «Sánchez», en el sector Conani, es un fiel ejemplo de la precariedad existente en lo que respecta a la enseñanza educativa pública.
María Quiroz, Jorge Tomás de la Cruz, dirigentes de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) y Cecilia Castillo, presidenta de la Sociedad de Padres y Alumnos de la Escuela Ángel Sixto Bonilla, explicaron que da pena observar cómo muchos niños de los cursos segundo y octavo grado «reciben docencia debajo de matas de javilla, mangos, samán y caoba» por la falta de aulas.
Afirmaron que esta escuela comenzó a funcionar el 12 de abril del 1968 en una casa prestada en el Ensanche Dubocq (Los Callejones), pero años después fue trasladada al local del Club Deportivo «General Gregorio Luperón» debido a que la dueña de la vivienda pidió se la devolvieran porque no tenía dónde vivir junto a sus hijos.
Hasta ese momento la Secretaría de Educación asignó al Club Gregorio Luperòn una asignación de RD$12.00 mensuales, sin embargo, en el año 1991 por disposición de la administración de la Lotería Nacional que encabezó el licenciado Fulgencio Espinal se dispuso la remodelación del Club Deportivo Gregorio Luperón y hubo que trasladar en el año 2001 hacia los terrenos de la antigua Chocolatera Sánchez la citada escuela.
Quiroz, De la Cruz y Castillo revelaron que desde entonces la docencia allí se desenvuelve con gran precariedad porque están en unos viejos almacenes y además no tienen butacas suficientes para albergar a tantos estudiantes.
Otro problema es que la ventilación es prácticamente nula por lo que debemos muchas veces despachar ante de tiempo a los alumnos por falta de visibilidad para explicar las diversas materias en los pizarrones».
Esta escuela cuenta con un total de 27 profesores, los cuales cubren las tandas matutina y vespertina, en los horarios de 8:00 de la mañana hasta las 12:15 del mediodía y de 2:00 a 5:30 de la tarde. Allí apenas existen 201 butacas para sentar a los mil 200 estudiantes que de los distintos barrios de la parte baja y la zona Oeste de la ciudad están inscritos para recibir dociencia pública gratuitamente.
La directora regional de Educación, licenciada Emelania Cid, informó recientemente que el Gobierno dispone de la suma de RD$300.0 millones para la construcción de 17 aulas la escuela Ángel Sixto Bonilla y para tales fines han sido ubicados unos terrenos adyacentes a la antigua Chocolatera Sánchez, sin embargo, de acuerdo a lo revelado por Quiroz, De la Cruz y Castillo, ésta ha sido una promesa más de las tantas que les han hecho a la familia educativa local en lo que respecta a la construcción de nuevas edificaciones escolares públicas.
Otros dos problemas que se adicionan a los existentes es que allí no hay energía eléctrica, los almacenes donde se imparte docencia carecen de ventilación y de baños, por lo que el alumnado tiene que recurrir a visitar montes cercanos a la escuela para realizar sus necesidades fisiológicas.