Faltan detalles en las promesas electorales Lula

Faltan detalles en las promesas electorales Lula

Por Jonathan Wheatley
En São Paulo

El presidente Luiz Inacio Lula da Silva reveló esta semana su plataforma para la re-elección, prometiendo estimular el crecimiento mediante el incremento de la inversión en la economía e introduciendo un salario mínimo nacional más alto. Aparte de las promesas para levantar la inversión en la economía a más de 25%, de 21%, y de aumentar el salario mínimo por encima de la tasa de inflación, el programa para su gobierno en el periodo 2007-2010 se queda corto en cuanto a metas y propuestas concretas.

En una reunión informativa antes de presentar el programa, Ricardo Berzoni, presidente del izquierdista Partido de los Trabajadores (PT) del presidente Lula da Silva, dijo que el segundo gobierno de Lula “continuaría el proceso de cambio” en marcha desde enero de 2003.

Los administradores de la campaña del presidente recalcaron la diferencia entre sus propuestas y las de Geraldo Alckmin, del centro-derechista PSDB, el principal retador del señor Lula da Silva por la presidencia.

Sin embargo, ninguno de los candidatos presentó mucha sustancia para diferenciar sus propuestas. El señor Alckmin todavía tiene que presentarle a los electores sus propio programa de gobierno, aunque ha prometido un “shock administrativo”, y aprovechar su récord como gobernador del estado de Sao Paulo de recortes en el gasto público y promover las inversiones.

La administración Lula ha mantenido en general las políticas de su predecesor del PSDB, utilizando las tasas de interés para controlar la inflación, manteniendo los excedentes primarios del presupuesto (antes del pago de intereses) para reducir la proporción deuda pública/producto interno bruto, y extendiendo los programas de transferencia de ingresos para ayudar a los pobres.

Las expectativas de inflación han caído dentro de la meta de 4.5% para este año, mientras que el crecimiento global ha impulsado la demanda de exportaciones brasileñas.

Mientras que el desempleo se mantiene alto, cerca de 10%, la creación de puestos de trabajo, la baja inflación y un crecimiento moderado han generado una satisfacción generalizada con la economía, mientras se acerca la primera ronda de votación del 1 de octubre.

Un sondeo de Sensus, una compañía de investigación de mercado, publicado al comienzo de esta semana da al presidente 51.45 de los votos, comparado con 19.6% para el señor Alckmin.

VERSION IVAN PEREZ CARRION

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