POR ARIDIO PERDOMO
PUERTO PLATA.- La madre, cinco hermanos y otros familiares cercanos del asesinado fiscal, Teódulo Ceballos Peñaló, dijeron estar conscientes de que su pariente fue eliminado físicamente “por encargo” y que dudan que las autoridades digan la verdadera razón del crimen y lleven ante los jueces a todos los responsables.

La señora Amancia Peñaló, acompañada de sus progenitores, licenciados Herodes, William, Lilian, Maritza y Ángel Manfredo Ceballos Peñaló, manifestó su indignación porque a casi dos meses del crimen “no sabemos quién o quiénes pagaron para que se cometiera este hecho de sangre que conmovió a la sociedad dominicana”.

Todos se reunieron el pasado miércoles en las oficinas del abogado César Peña Bonilla, ubicadas en la calle Principal del sector El Batey, en Sosúa, en compañía de amigos de la familia y dirigentes del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), para conversar con redactores del periódico HOY sobre el curso de las investigaciones.

Concluyeron en que el procurador general de la República, doctor Radhamés Jiménez, ha sido “negligente” en el caso y exigieron que el informe sobre la investigación por esa comisión se le dé a conocer a la sociedad para que se entere de las causas reales del crimen.

El fiscal Ceballos Peñaló fue abatido a tiros por una patrulla de la Dirección de Control de Drogas, que conforme se ha dicho, fue desde la capital hasta Sosúa a apresarlo, acompañada de los ayudantes de la Procuraduría, Frank Soto y Bolívar Sánchez.

La entrevista

El primero en hablar con los redactores de HOY fue Herodes, quien sostuvo hay testigos y que así se lo hicieron saber a los miembros de la comisión investigadora, que vieron a dos personas filmando los hechos con sendas cámaras y que, incluso, cuando Ceballos Peñaló cayó mortalmente herido, un oficial de la Policía que acompañó a los dos ayudantes de la Procuraduría, le gritó a la víctima “¡Habla ahora, bocón!”.

Agregó que los parientes y el pueblo de Sosúa, que al día siguiente protestó violentamente,  no aceptan la versión dada por ambos ayudantes de la Procuraduría, de que a Ceballos Peñaló se le investigaba sobre extorsión, porque, de haber sido así, los mecanismos que se utilizaron para supuestamente apresarlo “no fueron lo más correcto”.

En tanto, Lilian, electa en la boleta del PLD como vicesíndica en Sosúa, sostuvo que como fiscal, su hermano fue un “combatiente acérrimo del narcotráfico y por está razón nos lo enviaron a matar por encargo”.

Añadió que como fiscal Ceballos Peñaló logró bajar el índice de delincuencia en la provincia y que las pruebas están ahí porque “tenemos los videos televisivos donde éste aparece destruyendo más de 50 puntos de drogas”. Sostuvo que con el crimen contra un fiscal de esa naturaleza se ha enviado un mensaje a la sociedad en el sentido de que “el que se mete con el narcotráfico, se jodió”.

Manifestó que al procurador general no le interesa resolver este caso, porque desde un principio demostró debilidad al designar una comisión, sin suspender en funciones a sus dos ayudantes, Soto y Sánchez y tampoco loa puso bajo arresto.

 Añadió que la falta de temple del procurador Jiménez fue tal que ni siquiera gestionó en la DNCD y en la Policía que se hiciera lo mismo con los integrantes de la patrulla participante en el crimen. Reiteró que cuentan con un testigo que declaró a la comisión investigadora que frente a la casa de Ceballos Peñaló fue apostada una persona con un arma moderna con rayos infrarrojos, quien siempre se mantuvo apuntando a la cabeza de la víctima.

Se quejó de que las autoridades han sido tales que ni los nombres de los integrantes de la patrulla han sido publicados ni suspendidos en funciones por este caso.

 Advirtió que la sociedad y el pueblo de Sosúa no aceptarán explicaciones con resultados maquillados sobre lo sucedido la noche del 23 de noviembre.

Pidió que los ayudantes de la Procuraduría Soto y Sánchez, así como Domingo Belliard, sean suspendidos en funciones y se les someta a la justicia “porque ellos son los verdaderos responsables de la muerte de Ceballos Peñalò”. Dijo que a su familia nadie la ha amenazado, pero sí reciben llamadas telefónicas extrañas con promesas que han concluido en que son verdaderas burlas ante su dolor.

MADRE

Doña Amancia, la madre del malogrado Ceballos Peñalò, reclamó justicia en el caso, porque “no fue a un perro que asesinaron, sino a un ser humano y a una persona que no le hizo daño a nadie”.

“La muerte de mi hijo me tiene al borde de la desesperación. El no merecía esa muerte traicionera que le tendieron sus compañeros de labores en la justicia dominicana”, repitió.

Cree que si las autoridades dejan ese crimen sin castigo, otras familias correrán la misma suerte que la que ellos están pasando en estos momentos.

En tanto, William, otro de los hermanos, dijo que da pena que en estos tiempos sucedan crímenes de esa naturaleza y contra un fiscal que, según añadió fue “asesinado por su propia gente” en el Ministerio Público.

Sostuvo que “si eso se lo hicieron a Ceballos Peñaló, entonces qué no le puede pasar a cualquier ciudadano que se vea envuelto en algún problema con cualquier sector de estos”.

Dijeron que esta será la Navidad más triste que pasarán porque cada año, a la llegada del 24 de diciembre, contaban con la presencia de su pariente “pero ahora todo es diferente porque su silla estará vacía cuando nos juntemos, no para cenar, sino para pedir a Dios que ilumine a las autoridades para que sus asesinos paguen por su culpa”.

Dijo que el mejor regalo de Navidad que esta familia puede recibir del gobierno al cual ayudaron a subir al poder “es el esclarecimiento de este horrendo crimen y el posterior sometimiento a los tribunales de justicia de los responsables de este hecho de sangre”.

Finalmente, Ángel Manfredo afirmó que su familia espera que la Procuraduría General de la República emita un informe de este caso que deje satisfecho a ellos y al pueblo de Sosúa, porque de lo contrario jamás aparecerá otro personaje que quiera enfrentar con valentía los males que deja el narcotráfico como lo hizo su pariente.