SANTIAGO DE CHILE.  AP.  La senadora Isabel Allende se indignó ayer por un programa periodístico que abrió las puertas a la posibilidad de que su padre, el presidente Salvador Allende, muriera asesinado durante el cruento golpe militar de 1973.   “Hemos estado diciendo que estamos buscando la verdad… sobre la base de pruebas científicas, no las queremos sobre la base de especulaciones periodísticas”, dijo la legisladora, muy molesta.   Su ira se dirigió a la televisión estatal que, según ella, se dejó llevar “por el amarillismo”.   

La familia Allende está convencida de que el mandatario se suicidó para evitar ser capturado por los militares, durante la sublevación del 11 de septiembre de 1973.

El estelar “Informe Especial” emitió el lunes por la noche un programa en el que dos forenses que realizaron análisis comparativos entre los peritajes policiales y la autopsia efectuada en el Hospital Militar al cuerpo de Allende, concluyeron que el cráneo del mandatario recibió dos balas, de distintas armas.   La versión oficial, según la justicia militar del régimen del general Augusto Pinochet, señala que Allende se disparó debajo del mentón con un fusil de asalto AK 47 que le regaló su amigo, el líder cubano Fidel Castro.    El programa se emitió a 10 días de la exhumación de los restos de Allende por orden del juez Mario Carroza, que investiga las causas de su muerte, y la de otras 726 personas que fueron ejecutadas o desaparecidas por la dictadura.