Familiares de la fiscal asesinada Gissel Odalisa Reyes Díaz están disgustados por las declaraciones de las autoridades fiscales,  que atribuyen a lo pasional la  única causa del crimen.

La madre de la víctima, Milagros Díaz, está molesta por el hecho de que la investigación ha sido limitada a determinar si  la bala que la mató salió del arma del sargento que la acompañaba, Augusto Luciano Familia.

El fiscal del Distrito Nacional, Alejandro Moscoso Segarra, dijo que “el Ministerio Público está de luto” por la muerte de la fiscal adscrita al Departamento de Delitos Sexuales de la Unidad de Atención y Violencia de Género. Moscoso Segarra, quien dio a conocer la hipótesis de la comisión investigadora de que el crimen fue “pasional”, encabezó el sábado una misa a la  memoria de Gissel, en la parroquia San Antonio de Padua, en Gascue.

Los parientes ven con extrañeza que el sargento implicado sea de San Juan y que uno de los dos hombres acusados de  la muerte, Juan Carlos Aquino Mesa, de 28 años, fuera arrestado en San Juan de la Maguana. El otro imputado en el asesinato y que se entregó voluntariamente es Pedro Julio Ortega, de 23 años. Ambos están sometidos a tres meses de prisión preventiva por el crimen del  domingo.

El Ministerio Público no ha se ha referido a la supuesta participación de los dos acusados.