Caracas.– Familiares del inspector alzado contra el Gobierno Óscar Pérez y de los otras seis personas de su grupo abatidas el lunes en una operación policial pudieron anoche ver los cuerpos de sus parientes e identificarlos, después de cuatro días intentando tener acceso a los restos en la morgue de Caracas.
“Teníamos entendido que tenía que venir un fiscal a autorizar para realizar todo lo que era el procedimiento de reconocimiento y posterior entrega. Por eso fue la demora, el fiscal demoró en llegar, desconozco por qué razones, y por eso el procedimiento se realizó ayer en horas de la noche”, dijo la abogada María Fernanda Torres.
La letrada -que hizo estas declaraciones frente a la morgue- forma parte del grupo pro derechos humanos Foro Penal, que da asistencia jurídica a detenidos por motivos políticos y víctimas de la represión en Venezuela.
Torres explicó asimismo que los familiares ya están en contacto con los servicios funerarios para poder retirar los cuerpos, una vez las autoridades les den permiso.
Diputados opositores, que desde el lunes han tratado de conseguir que los familiares puedan ver y hacerse cargo de los cadáveres, contaron ayer a Efe que los allegados de los abatidos denunciaron presiones de las autoridades para que autorizaran la cremación de los cuerpos.
Los parlamentarios temían que de esta forma se eliminaran pruebas clave sobre el operativo que acabó con el grupo, una acción calificada por la Iglesia católica venezolana de “masacre” y que ha sido denunciada por algunos grupos pro derechos humanos como una “ejecución extrajudicial».
Según la abogada Torres, Foro Penal tiene constancia de la detención de cinco personas en relación con el caso de Pérez. Algunos de estos detenidos -a los que el Foro presta atención jurídica gratuita- ya han sido presentados ante tribunales militares.
El Gobierno de Nicolás Maduro considera a Pérez y sus hombres “terroristas”, y asegura que su muerte se produjo en un “enfrentamiento” con las fuerzas de seguridad después de que estas los localizaran en una casa del popular barrio caraqueño de El Junquito.
En una serie de videos grabados y difundidos por el grupo de alzados minutos antes de que murieran abatidos, se ve a Pérez y sus hombres pidiendo a los agentes del Estado que desobedezcan a sus jefes y se unan a ellos.
Pérez, que aparece herido en uno de los videos, pide también una salida negociada a la situación que permita salvar la vida de los civiles inocentes que, según dijo, había en la casa.
Una grabación tomada desde el exterior de la vivienda permite ver cómo la estructura salta por los aires al accionar las fuerzas del orden un lanzacohetes antitanque.
Pérez, que tenía 36 años, se alzó contra Maduro en junio pasado, cuando sobrevoló Caracas en un helicóptero de la Policía científica -a la que pertenecía- y efectuó disparos contra dos edificios públicos sin causar heridos.
El inspector -que grabó desde la clandestinidad varios videos en los que manifestaba su intención de derrocar la “tiranía” chavista- volvió a actuar en diciembre al liderar con sus hombres el asalto a un cuartel militar, del que se llevaron armas después de someter sin causar heridos a los soldados y recriminarles su lealtad a Maduro.