En medio de testimonios de  honestidad por parte de sus parientes más cercanos, fueron sepultados ayer los restos de Carlos Manuel Vicente Rivas Castro, uno de los cuatro hombres que fueron encontrados muertos a tiros el miércoles cerca del kilómetro 30 de la Autopista Duarte.

Luego de ser velados durante dos días a la espera de su madre Julia Rosa Rivas y de su hermana, el cuerpo del joven fue sepultado a las nueve de la mañana con  la exigencia de sus familiares al jefe de la Policía, mayor generalRafael Guillermo Guzmán Fermín,  para que resuelva cuanto antes la masacre.

La madre, quien llegó desde Holanda el jueves, no soportaba el dolor de ver perder a su único  varón, el mayor de sus dos hijos. La hembra vive en Europa.

Por eso no pudo recibir a periodistas de este diario que acudieron a su casa, la  número 130 de la calle Segunda, en el sector Los Mameyes, de Santo Domingo Este.

En cambio dejó que fuera su hermano Ramón Castro quien conversara en torno a la vida de su hijo, quien trabajaba como chofer de Elvin Noel Díaz Domínguez, otro de los muertos. 

Castro, defendió la honestidad de su sobrino, a quien vio nacer y crecer estudiando hasta alcanzar el bachillerato, además de que era un joven que siempre se mantuvo en su casa.

El tercer  muerto fue identificado como Ramón Leonardo Paulino, de 32 años, quien residía en calle Respaldo Sagrario Díaz, en el barrio El Semillero, Bella Vista, en el Distrito Nacional.

Sin fichas.  Rechazó cualquier versión, como la policial, que le atribuyó antecedentes delictivos no especificados, tras afirmar que nunca pisó la puerta de un destacamento, ni siquiera por asuntos de tránsito.

Jonatan Castro, primo hermano del fallecido, aprovechó la visita de los reporteros para destacar sus condiciones humanas, lo que hacía que fuera querido por todos.

Por eso, al igual que Ramón, demandó de la Policía no descuidarse e investigar hasta capturar a los responsables del hecho que ha consternado a la sociedad, sobre todo por la forma en que perpetraron el crimen.

Al respecto,  Guzmán Fermín prometió que  se hará una investigación       mediante  técnicas científicas.

El papá.  Hace cuatro años que murió trágicamente el padre de Carlos Manuel, Alcibíades Montero, al ser sorprendido por delincuentes una madrugada cuando salía en una motocicleta hacia el Mercado Nuevo de la Duarte.

Sospechosos.  Los familiares de Rivas expusieron que el día que llevaron el cadáver a la vivienda se presentaron dos hombres en un carro de taxis que pasaron dos o tres veces por la calle, casi deteniendo la marcha, aunque aseguran que no pudieron identificarlos.

 De ahí que instan a los investigadores a profundizar las pesquisas sobre el crimen y dar con los asesinos.

Zoom

Una niña

Carlos Manuel Rivas dejó huérfana a una niña de seis años, quien cumplía años la próxima semana y había pedido a su padre que la llevara a un resort.

 Tragedia

 La tragedia sigue a la familia, ya que hace cuatro años el padre de Rivas cayó abatido en manos de delincuentes cuando salía de su casa con destino al trabajo.