TAMBORIL.  Familias afectadas por una riada en este municipio solicitaron del Gobierno la construcción de viviendas, debido a que muchas de ellas quedaron sin hogar y están alojados en casas de familiares y amigos.

Las familias Rodríguez Alcántara, Marcelino y Santana Tavárez tuvieron que dormir en la calle cuando el pasado fin de semana debieron salir de las casas donde se refugiaron por la ríada del pasado lunes, que arrasó viviendas, colmados, automóviles, tiendas y efectos del hogar.

Mientras tanto, el párroco de la iglesia San Rafael, quien además es presidente del comité de ayuda, informó esta mañana que está a la espera de que el gobierno disponga la construcción de casas para los damnificados. Dijo que se hizo un levantamiento y fueron censadas las familias que perdieron sus viviendas.

El padre Felipe Colón informó que para esa obra hay solares disponibles en este poblado, donde podrían esas familias vivir dignamente, al tiempo que se opuso a que las autoridades las dejen abandonadas con sus hijos.