BOGOTÁ (AFP).- Un reportero gráfico fue secuestrado el sábado en un retén instalado por las FARC en una zona selvática del municipio de Dabeiba (noroeste), en una nueva agresión contra la prensa que se suma a las amenazas de muerte contra 16 comunicadores, informaron este domingo las autoridades.

   Hernán Echeverry, fotógrafo y socio del periódico regional Urabá Hoy, cayó en poder de los rebeldes cuando se movilizaba en su vehículo entre el municipio de Apartadó y la ciudad de Medellín, dijo el comandante de la Brigada número 17 del Ejército, general Héctor Fandiño.

   «Pudimos confirmar que este reportero fue secuestrado por miembros de la cuadrilla 34 de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en un sector próximo a Dabeiba», indicó el oficial.

   Por su parte el director de «Urabá Hoy», Jairo Banquett, indicó que su colega había salido el sábado hacia Medellín con el propósito de reunirse con su esposa y unos amigos, pero que no volvió a saber de él hasta cuando se confirmó que había sido secuestrado.

   «Esta mañana llamé a Medellín para saludar a la esposa y ella me dijo que él no había llegado (…) Hernán es un jubilado, una persona ya de edad, que tiene el periodismo como un hobby», indicó el directivo.

   Las Fuerzas Militares desarrollaban este domingo operaciones tendientes a obtener su rescate, añadió el general Fandiño.

   Además de ejercer el periodismo gráfico, Echeverri coordina el plan social «Prolongando vida» que ofrece alimentación a las personas de la tercera edad de la región.

   El hecho se produjo el mismo día en que la prensa confirmó que otro reportero colombiano, Antonio Colmenares, debió salir de la ciudad de Cúcuta presionado por amenazas de muerte.

   Colmenares, redactor del diario La Opinión de Cúcuta, en la frontera con Venezuela, envió a sus jefes una carta anunciando su salida de la ciudad a raíz de las advertencias que le han hecho llegar personas que no identificó, dijo el subdirector del rotativo, Cicerón Flores.

   Su caso se dio a conocer diez días después del asesinato del también periodista Julio Palacios, quien fue atacado por sicarios motorizados en una calle de Cúcuta, cuando se dirigía a la emisora donde dirigía un noticiero.

   Dos días después el periodista Jorge Corredor, refugiado en Venezuela por amenazas, anunció que se exiliará en Europa ante las nuevas intimidaciones que ha recibido desde Cúcuta, de donde debió huir en abril tras sobrevivir en un atentado en el que perdió la vida una hijastra suya.

   Según la Fundación para la Libertad de Prensa (Flip), la región fronteriza es una de las que reviste mayor riesgo para el ejercicio de los periodistas en Colombia, «lo que se evidencia en el hecho de que 16 de ellos han sido amenazados».

   Colombia es considerado el país más peligroso del mundo para ejercer el periodismo, con más de 120 comunicadores asesinados en los últimos 14 años, principalmente por los grupos armados irregulares -guerrilla y paramilitares- y por la mafia del narcotráfico, según la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y otras organizaciones de prensa internacionales.