Fe y Alegría es principalmente conocido por sus escuelas. Claro, ella se entiende principalmente como “un movimiento internacional de educación popular integral.” Pero  es también un movimiento de “promoción social”. La ocasión de celebrar el  XX Aniversario de Fe y Alegría Dominicana nos va a permitir compartir experiencias  sobre esa dimensión.

 El Plan Estratégico que nos hemos dado para los próximos cinco años reitera ideas claves como a) crear escuelas de padres y madres, b) ofrecer programas de formación cívico-ciudadana para la comunidad educativa. c) proporcionar  servicios de salud y alimentación para provecho de alumnos y vecinos, y c) proponer cursos de formación para el trabajo y la vida en particular la alfabetización.

Nos fijaremos ahora cómo la salud, la alimentación y la educación para el trabajo se unen a la escuela. Actualmente los centros El Carmen del barrio de La Lotería de La Vega, Santo Niño Jesús del batey Lechería, Marie Poussepin de Jaragua, Cardenal Sancha de Sabana Perdida, Ciriaco María de Marañón II, Espíritu Santo de Baní, Angélica Massé del barrio Villas Agrícolas, San José de Pantojas ofrecen servicios de alimentación a sus alumnos y a algunos vecinos necesitados.

Una historia diciente. La hermana Ismelda Cruz,  del cardenal Sancha y directora del centro inicial y básico  Ciriaco María de Marañón II, un barrio al norte de la Avda. Charles de Gaulle, es ilustrativo. La promoción 2009 del colegio Loyola le regaló  los beneficios del baile de graduación y preguntaron si ella quería pupitres o comida. Y ella no se hizo esperar, “comida, porque de sentarlo los siento sobre un block, pero no los puedo pedir atención a las clases   con el estomago vacío.”

En el orden de la salud,  el Carmen de La Vega, San José de Pantojas, Cardenal Sancha de Sabana Perdida, Espíritu Santo de Baní, Santo Niño Jesús del batey Lechería y Camila Henríquez de Los Alcarrizos (sólo odontología)   tienen dispensarios médicos para atender a los alumnos y a vecinos necesitados. Al 21 de enero de 2010 contabilizamos 86,803 servicios médicos.  El  más destacado en el trabajo de salud es  el Cristo Obrero de  San José de Pantojas.  Tiene un personal de seis   médicos, cuatro enfermeras, dos bioanalistas, dos secretarías y dos conserjes. El récord de asistencia mensual es de 1,500 pacientes.

Planes futuros serían los dispensarios del centro Nelly Biaggi, de El Almirante, Santo Domingo Este, Cristina Billini Morales, de Los Guaricanos, Santo Domingo Norte, y en el Camila Henríquez, de Los Alcarrizos. Todos están habilitados del instrumental y la medicina  pero carecen de médicos.

La más reciente iniciativa es la  costura, en alianza con Infotep. Hemos abierto cursos para señoras vecinas en el Camila Henríquez de Los Alcarrizos, san José de Pantojas, y La Inmaculada de Los Frailes, Santo Domingo Este. Debemos destacar dos  experiencias. La del  Marcos Castañer, de Madre Vieja Norte, San Cristóbal, un centro muy completo que va desde el nivel inicial al medio, sostiene desde hace años relaciones con Infotep para ofrecer informática, belleza, cocina, repostería, costura y electricidad, a los vecinos del barrio. Además, los fines de semana reúne alumnos de las Escuelas Radiofónicas Santa María para clases de alfabetización. Y de manera muy especial la del Carmen de La Vega, que gestiona una panadería para consumo de alumnos y para vender a los vecinos y generar recursos.

Cada centro cultiva sus propias relaciones. Una fuente común de ayudas, es el Ministerio de Salud. Pero además  Fe y Alegría gestiona fondos y los distribuye proporcionalmente. En la actualidad sus principales fuentes son la Universal de Seguros y Voluntariado del Banco de Reservas.