Las organizaciones sindicales que agrupan a los trabajadores hoteleros de la Región Norte se sumaron a los sectores que reclaman un trato justo al sector turístico en el marco de la reforma fiscal sometida al Congreso Nacional por el Poder Ejecutivo.

Jorge López y Javier Jiménez, quienes hablaron a nombre de los gremios hoteleros de la Costa Norte, solicitaron a los diputados y senadores que adopten las medidas necesarias para evitar que la industria turística dominicana pierda su capacidad para competir con los demás destinos turísticos del Caribe.

“No reclamamos un trato privilegiado para nuestro sector, sino que  el Estado garantice que el turismo dominicano pueda mantener una oferta atractiva o en condiciones similares a las que ofrecen los demás países de la Región, indicaron los dirigentes laborales.

Se refirieron a los casos de México, Cuba, Jamaica y Bahamas donde se han establecidos tasas preferenciales en el impuesto a la transferencia de Bienes Industrializados para mejorar la competitividad de su industria turística.

Jorge López, quien  es presidente de la Coordinadora Regional de Trabajadores Hoteleros, filial de la Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC),  dijo temer que se pierdan muchos miles de empleos si el turismo dominicano no logra mantener determinados niveles de competitividad.

Federación nacional apela al Congreso. La Federación Nacional de Trabajadores Hoteleros, de restaurantes y del Turismo (FUNATRAHOREST) remitió sendas comunicaciones a los presidentes del Senado de la República y de la Cámara de Diputados, para que la reforma fiscal no agrave las condiciones del sector turístico dominicano.

Tras reconocer que los costos actuales de la industria turística nacional ya son sumamente elevados, la entidad sindical afirma que este sector no soporta un aumento de su carga fiscal.

Manolo Ramírez y Pedro Peña Faña, presidente y vicepresidente de la Federación de los Trabajadores Hoteleros, expresan que “el turismo, como sector estratégico de la economía y  principal generador de divisas y de empleos del país, no debe ser abandonado a su suerte en una reforma fiscal que podría constituir su salvación o su bancarrota”.

Los sindicalistas apoyan los pronunciamientos de la Asociación Nacional de Hoteles y Restaurantes (ASONAHORES) para que se reconozca al turismo como sector exportador y se establezca un Itbis del ocho por ciento para el consumo de los turistas que llegan al país, como sucede en la Riviera Maya de México, Jamaica y Bahamas, donde se ha logrado un alto nivel de crecimiento en términos de inversiones  y  visitantes, al igual que en Cuba, donde no existe ese impuesto.