Roger Federer logró este sábado la victoria ante el australiano Nick Kyrgios en la Copa Laver, el torneo entre las mejores raquetas europeas y las del resto del mundo, con ayuda de los consejos de Rafael Nadal desde el banquillo, que según el tenista suizo fueron clave en el cambio de su juego.
“Lo que me encanta de Rafa es que a menudo nuestras ideas se alinean”, reconoció el número tres mundial en la rueda posterior al encuentro, tras el que Europa se colocó con una ventaja de 5-3 frente a la selección del Resto del Mundo.
Nadal “es un gran solucionador de problemas, hay que admitirlo”, y a la hora de conseguir puntos decisivos “es excelente”, añadió Federer, quien ha aparcado la rivalidad deportiva con el balear estos días para intentar conseguir junto a él el tercer título europeo en la Copa Laver.
Federer recordó que ya conoce la competitividad de Nadal en este torneo -del que el suizo es uno de los socios patrocinadores- desde que él y el manacorí jugaron mano a mano un mítico partido de dobles en la primera edición de Praga 2017, encuentro en el que se impusieron en tres sets a Sam Querrey y Jack Sock.
“Siempre está buscando una nueva forma de ganar o de mantenerse en su camino si siente que es el ganador, ésa es la verdadera razón de que sea el campeón que es actualmente”, admitió.
Federer y Nadal compiten por el subjetivo honor de que uno de ellos sea considerado el mejor tenista de la historia, dado que ambos tienen el mayor número de títulos de Grand Slam en la historia del tenis masculino (el suizo, de 38 años, tiene 20, y el español, con 33 años, ostenta sólo uno menos).