MONACO.   AP.   Roger Federer puso en marcha de forma impecable su temporada en canchas de arcilla al despachar ayer 6-2, 6-1 al alemán Philipp Kohlschreiber en la segunda ronda del Masters de Montecarlo.

El astro suizo, segundo preclasificado tras la baja de Novak Djokovic del torneo, le quebró el saque a Kohlschreiber al comienzo de cada set y se apuntó la victoria en apenas 50 minutos.    «Sin duda fue un buen comienzo para mi temporada de arcilla», comentó Federer. «Pude hacer todas las cosas que quise».

Federer, que ha perdido tres veces ante Rafael Nadal en la final de Montecarlo, mantuvo a Kohlschreiber a la defensiva y corriendo de lado a lado para perseguir sus disparos.

«Pude implementar un juego variado y no cometí muchos errores», señaló Federer, cuyo único título este año fue en enero en Qatar.

Federer salvó el único punto de quiebre.