Llennis Jiménez 
SUSI POLA
Activistas, feministas y defensoras de los derechos de las mujeres califican de retroceso la idea de fusionar a los ministerios de la Mujer y la Juventud con el de Cultura y representantes como Susi Pola advierten que sería como volver al Medioevo, violando preceptos constitucionales del 2010 y permitiendo la desprotección de una población que aporta más de la mitad del desarrollo de la nación dominicana. La propuesta la repudia Virtudes de la Rosa, directora del Instituto de Investigación y Estudios de Género y Familia de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (IGEF-UASD).
La doctora Liliam Fondeur también rechaza las opiniones de quienes animan la unificación del Ministerio de la Mujer con Juventud y Cultura.
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Pola, abogada y feminista
Calificó la medida de estupidez, por ser dos necesidades para la mayoría de los ciudadanos. Sostuvo que el presidente de la República, Luis Abinader, dijo que no va a unir el Ministerio de la Mujer. “Sería una tontería quitar el Ministerio de la Mujer”.
Manifestó que los ministerios de la Mujer y de Juventud son dos exigencias de la política de igualdad, constitucionales. “El Ministerio de la Mujer no se puede refundir con nada. Tiene que continuar para conseguir que las mujeres dominicanas, que conformamos, por lo menos la mitad, que contribuimos a la economía de este país, ya que sin el trabajo de la mujer, aun sea analfabeta, no habría economía posible”.
Afirma que los espacios dedicados a la reflexión de la mujer son políticas de avance de los derechos humanos; por tanto, retroceder sería un retroceso en los derechos humanos. Pola sacó a reducir que los ministerios de la Mujer y de la Juventud trabajan con los presupuestos económicos más bajos de la República Dominicana, de ahí que sugiere la necesidad de ejercer una política transparente, que responda a las necesidades que tienen esas dos instituciones.
Destaca que el Ministerio de la Mujer ha logrado la equidad de género que tiene el país, con el presupuesto que tiene y una valoración de práctica política mínima desde los partidos.
De la Rosa
La profesora advirtió que sería un grave error fundir o hacer desaparecer cualquiera de estos dos ministerios, responsables de definir y monitorear la aplicación de políticas públicas a poblaciones colocadas en condiciones de fuertes vulnerabilidades y básicas para asegurar un desarrollo sostenible.
“Todas las estadísticas demuestran las grandes brechas de acceso a garantías de ejercicio de derechos entre hombres y mujeres”. Defendió la necesidad del Ministerio de la Mujer para la erradicación de la violencia basada en género, el embarazo en adolescentes y su acceso a la economía.
Ginecología Fondeur
La doctora entiende que eliminar el Ministerio de la Mujer sería restarle importancia a sus derechos construidos en los siglos y a su vulnerabilidad de su proyecto de vida, “que es un factor de riesgo para la muerte”.
