La Federación Nacional de Comerciantes y Empresarios de la República Dominicana (FENACERD) se solidariza con el pueblo haitiano ante la tragedia y llamó al sector comercial y empresarial del país encaminar acciones para llevar asistencia a los sobrevivientes del terremoto de magnitud 7.0 grados en escala Richter.

Ricardo Rosario, presidente de la entidad, advirtió que ante la desgracia, el dolor y la desesperación que invade al vecino país lo aconsejable sería evitar el surgimiento de olas especulativas e incrementos en los precios de productos comestibles y medicinas en pueblos fronterizos y la nación haitiana.

“Este es un momento de solidaridad y apoyo que no debe aprovecharse para obtener beneficio con la desgracia ajena.  En lo que cierne a la Fenacerd anunciamos la conformación de una comisión compuesta por sus siete directores regionales bajo la dirección de nuestro departamento de Asuntos Internacionales con la intención de recabar ayuda y acudir en auxilio de nuestros vecinos”, explicó.

Rosario indicó que a través de sus más de 30 mil afiliados y relacionados la entidad  recaudará alimentos enlatados, agua potable, casas de campaña, medicinas y otras facilidades que contribuyan con el mejoramiento de las condiciones de los sobrevivientes del movimiento telúrico. 

“Los centros de acopio para recibir los aportes que destinaremos  al pueblo haitiano están habilitados en Comercial Payano, en San Cristóbal; almacén Duarte, en San Franciscos de Macorís; Almacenes Ruiz, en La Vega; la sede de la Fenacerd en la avenida Rafael Augusto Sánchez, en la capital; y las oficinas de la entidad que funcionan en las provincias Santiago, San Pedro de Macorís y el municipio Santo Domingo Norte”, expuso el presidente de la Fenacerd.

Rosario también manifestó, en nombre de la entidad, su más profundo pesar y solidaridad con la nación haitiana por los muertos y heridos que hasta el momento  contabilizan los organismos que trabajan en las labores de rescate. 

Manifestó que el intercambio comercial dominico-haitiano incide positivamente en la economía nacional y el momento obliga a que las autoridades tomen medidas alternas que resguarden a los comerciantes y productores en la frontera.