El presidente de la Federación Nacional de Transporte la Nueva Opción (Fenatrano), Juan Hubieres, demandó al Gobierno retomar el diálogo en la mesa del transporte para buscar una salida al problemas de ese servicio, de lo contrario aplicarán la fórmula del comercio de traspasar los costos al consumidor.
Durante una asamblea con dirigentes de la ruta 27 de Febrero, Hubieres respalda que el subsidio de combustibles sea eliminado a todos los sectores, sin excepción, para de esa manera terminar con la “mafia” que se lleva más de 69 mil millones de pesos cada año por esa vía.
Sugirió a las autoridades permitir a Fenatrano importar dos millones de galones de gasoil mensualmente, con el pago de sus impuestos, tal como se le permite a diferentes sectores empresariales, entre ellos al de zona franca.
El dirigente choferil instó a la sociedad dominicana a movilizarse contra las medidas que adopta el Gobierno que cada vez disminuyen los bajos ingresos que reciben los pobres y trabajadores que devengan salarios de miseria.
Negó que exista un monopolio de los transportistas de pasajeros y de cargas, como pretenden hacer creer algunos sectores empresariales que, afirma, andan detrás de esa práctica y para ellos pretenden destruir las organizaciones del transporte.
Lamenta que el Gobierno decida gobernar para quienes define como “saqueadores” que en el 2013 recibieron 69 mil millones de pesos, solo en subsidio de combustibles, a parte del que se otorgó a la electricidad que fue de 1,700 millones de dólares. Señala que este año el Gobierno tiene un subsidio al sector empresarial de 39 mil millones de pesos, solamente en combustibles.
Dice que mientras la mayoría de los sectores pobres y los transportistas sustentan el 67% del Presupuesto General del Estado para 2017, son los que más golpeados porque el interés es que el pequeño grupo que se queda con el celebrado crecimiento económico, lo controle todo.
Aclara que Fenatrano no pide subsidio, sino que se le permita importar libremente el combustible que sus unidades consumen, con el pago de los impuestos correspondientes, como lo establece la Ley.
Reiteró la existencia de una mafia que se aprovecha de la Ley de Desarrollo Fronterizo para trasegar combustibles a actividades que nada tienen que ver con la actividad que dicen desarrollar.
Informó que ese combustible lo venden en Santiago, Santo Domingo y el Este del país, donde obtienen grandes beneficios económicos.