POR VICENTE SOBREVELA
El presidente Leonel Fernández dijo anoche que sería partidario de una reforma a la Constitución de la República, pero que «no caiga en la grosería de solo discutir el tema de la reelección presidencial» y que en ella se toque a los tres poderes del Estado.

Abogó por una reforma que pueda enmendar las lagunas y ambigüedades que actualmente tiene el texto constitucional como el referente al poder Judicial.

Fernández dictó una conferencia ante los miembros e invitados de la Cámara Americana de Comercio de la República Dominicana.

En su exposición, Fernández propuso una discusión o debate para delimitar las fronteras de los poderes públicos.

El jefe del Estado se preguntó si la Suprema Corte de Justicia tiene la facultad Constitucional para anular un decreto presidencial, una resolución municipal y si la tiene de dónde emana.

También se cuestionó si con esas acciones la Suprema Corte de Justicia no estaría invadiendo la esfera de acción de otro poder público.

El presidente dijo que son esos puntos los que se deben analizar y ese debate es el que hace falta y así se delimitarían las fronteras del ámbito de acción de los distintos poderes públicos.

Informó que ante la ausencia de estos puntos, no se puede hablar de una democracia que este funcionando adecuadamente y el país reclama de una democracia más participativa.

Abogó para que se incorporen en la Constitución los derechos sociales, culturales, de género, de medio ambiente y recursos naturales, que actualmente no figuran.

«Estamos operando con una carta substantiva que no se corresponde con las aspiraciones de un Estado moderno del siglo 21 «y es eso lo que hay que discutir».

Dijo que le apena que el Congreso puede propiciar una reforma constitucional apresuradamente y no en función de la colectividad nacional, sino en el interés de las apetencias de poder de los gobernantes de turno, «por lo que este país ya no acepta eso más y no podría tolerar una situación de esa naturaleza.”

Fernández también abogó por una reforma del poder Ejecutivo con relación a las actuaciones, aunque dijo que el artículo 55 no le confiera el presidente atribuciones especiales, sino que es el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, y esto sucede en cualquier país del mundo, por lo que no hay nada en especial.

«Lo que pasa es que el país, todavía psicológicamente no ha superado una situación de dictadura y totalitarismo», dijo.

Manifestó que un presidente de la República no puede ser un micro-gerente, sino que está en el cargo para pensar en las cosas que pueden significar un impacto.

Sobre el poder legislativo, Fernández dijo que también tiene que cambiar, “pero no entraré en detalles porque los necesito».