Ministro Consejero en Holanda

“…hay quienes llegan a ser grandes solicitando favores a otros, pero los hay también, aquellos que alcanzan tales grandezas, merced al resultado de sus propios esfuerzos”, resalta Shakespeare en su obra “La fierecilla domada”.

Fernando Ureña Rib, el Pincel de Oro de la plástica dominicana, me hace recordar una vez más al poeta y dramaturgo de Stratford-upon-Avon.

Fernando es hoy día una gloria nacional dominicana gracias al resultado de su propio esfuerzo, dueño de virtudes que resplandecieron por entre su natural sencillez. Tuvimos el privilegio de convencerlo para que viniera a La Haya con su esposa Carmela a realizar su primera exposición individual en Holanda.

En mayo del 2011, siguiendo las instrucciones de mi jefe de misión diplomática, llevamos a cabo este proyecto cultural sin precedentes para la política exterior dominicana ante el Reino de los Países Bajos. Fue presentado en una selecta galería de arte en la Anna Paulownastraat, justo detrás del Palais de la Paix.

“No hay mayor privilegio que el recibirle y exponer las obras de un gran dominicano como usted, señor Ureña”, señalaba el embajador Luis Arias durante su discurso de “vernissage”.

Ya para el 1997, tuve el honor de contribuir en Montreal con la exposición de Ureña Rib auspiciado por la Oficina de Turismo y con promociones especiales en el 2008 en Ottawa, sirviendo de parámetro a otras misiones diplomáticas dominicanas.

Con su viaje, esta vez al universo, se apaga un pincel, como expresa en su lamento nuestro ministro de Cultura dominicano sobre Fernando. Ciertamente se desvanece un pincel de altísima estirpe, pero renace otro con la travesía al infinito del autor de “El hombrecillo verde” y “Para llegar al limbo”, del profesor de maestros, “du grand maître dominicain”, del amigo, del fino diplomático dominicano y ministro consejero en Berlín, políglota, pintor y escritor, del colega, del extraordinario ser humano, Ureña Rib. Invito al pueblo dominicano y a los amantes de las bellas artes de todos los continentes, a visitar este álbum con fotos inéditas de Fernando en Holanda. Es una muestra histórica de la primera y última exposición individual de Fernando Ureña Rib en su paso por la tierra de molinos de viento, cuna de Vincent van Gogh, de Rembrandt y de Issac Israels. Veinte pinturas al óleo, de la serie “Decir la Piel”, aun frescas en la memoria de todos los que fuimos testigos. http://portfolio.artfotos.nl/#!album-552

Otras reseñas pueden encontrarse en http://www.embajadadominicana.nl/page31.html.