El Gobierno aseguró ayer que el Fideicomiso de la Termoeléctrica Punta Catalina no implica privatización de esas plantas, que seguirán siendo 100% propiedad del Estado.

La información fue dada en el Palacio Nacional por el vocero de la Presidencia, Homero Figueroa, quien precisó que la decisión buscan preservar y optimizar la inversión, administración, operación y fuente de pago de las plantas y no privatizarlas.

Indicó que el fideicomiso es una relación de voluntad y confianza mutua entre dos partes para administrar fielmente los bienes cedidos, en estricto apego a las instrucciones y a los requerimientos formulados por el propietario.

Figueroa indicó que el artículo 3 del decreto 538-21, señala de forma clara que las partes constitutivas del Fideicomiso Público de la Central Termoeléctrica Punta Catalina son instituciones del Estado.

El funcionario enfatizó que las instituciones son CDEEE, que a través de la Comisión de Liquidación, transfiere los derechos; la Fiduciaria Reservas S. A., que recibe en calidad de administradora los bienes, y el Ministerio de Hacienda, que sería el beneficiario en favor de quien se administran los bienes y derechos cedidos al Fideicomiso.

«Queda claro que el Estado es quien cede, es quien recibe y es el beneficiario. No puede entonces llamarse privatización a una operación sin empresas privadas”, expresó.