Fiesta Nacional de Italia

Fiesta Nacional de Italia

POR MARÍA MERCEDES 
Congregaron a sus invitados con gran alegría y orgullo. Sin duda, esos sentimientos que reflejaban los rostros del embajador de Italia, Giorgio Sfara y su esposa María Antonia respondían a un motivo muy especial: era la celebración de la Fiesta Nacional de su patria.  Durante el tiempo de recibimiento de los invitados, los anfitriones estuvieron acompañados de Gian Franco Morricone, jefe de seguridad de la Embajada, quien lucía el carabiniere, traje del policía italiano.

A medida que las personalidades llegaban a su residencia ubicada en el ensanche Naco, se fueron colocando alrededor del área de la piscina, donde tuvieron la oportunidad de intercambiar opiniones de forma muy amena.

Pasada las 8:00 de la noche, el acto formal inició con la entonación del Himno Nacional y el Himno de Italia. A esa hora, cuando reinaba un fuerte calor, el embajador, en el podio junto a las banderas de ambas naciones, dio las gracias a todos los asistentes, porque en ese momento estaban estrechando sus lazos de amistad.

Agradeció a las personas amigas de Italia y a los numerosos exponentes de la importante comunidad italiana que viven en República Dominicana, por los lazos de amistad y comerciales que les unen.

«Yo no he preparado un texto escrito por muchas razones, primero porque quisiera hablar con el corazón, abierto de amor y amistad». Así, con emotivas palabras expresó que esa era la tercera vez que celebraba junto a los dominicanos la Fiesta Nacional de su país.

«En los tiempos propios de la vida de un diplomático, cuando se habla de un acontecimiento anual que alcanza a su tercera ocasión significa entrever no muy lejos del horizonte la meta de llegada que señala el fin de una etapa. Por esta razón quiero manifestar mi más sincero agradecimiento a todos los dominicanos y a las dominicanas, que con su cortesía y amabilidad han hecho más agradable nuestra estadía en el país, y han tenido un papel inigualable al facilitar mi trabajo».

Recordó, algunos hechos importantes, entre ellos la intervención de su país en la tragedia de Jimaní, donde aportaron a través de materiales, utensilios de cocina, unos 300.000 dólares para ayudar a paliar la crisis surgida, así como unos 500.000 dólares para la realización de casas-tiendas y calles en la zona del Pozo de Nagua y de Samaná, luego del paso del huracán Jeanne».

También se refirió a la visita al país del honorable Matteoli, quien abrió la vía a importantes colaboraciones en el sector ambiental e hizo hincapié en la fuerte presencia italiana en la VIII Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2005, actividad cultural que consagró las excelentes relaciones existentes entre ambos países en el campo cultural.

«De manera especial, quiero mencionar rápidamente la cosa más importante que esperamos realizar en los próximos meses. Durante el verano debemos revelar al ganador del concurso de narrativa Edilio Rusconi, que incluye una dotación de 5.000 euros, más publicaciones y viajes a Italia. También está a la espera de importantes acuerdos internacionales en materia de promoción y protección de las inversiones, así como ambiental y cultural, del que ya han realizado los primeros contactos para terminarlo en el transcurso de un año. De igual forma, está en proceso un acuerdo para regularizar el flujo de trabajadores dominicanos en Italia.

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