Godollo, Hungría.  Agencias.  Los ministros de Economía europeos fijaron ayer  en unos 80.000 millones de euros el monto del rescate de Portugal, que deberá aplicar un severo ajuste y un «ambicioso» programa de privatizaciones para beneficiarse de ese plan destinado a salvarlo de la bancarrota. 

El plan será «probablemente de una magnitud de unos 80.000 millones de euros», indicó el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, durante una reunión de los ministros en Godollo (Hungría). Se tratará de un «programa plurianual, lo más probable de tres años», precisó.

Portugal, por su lado, deberá prever un «ambicioso programa de privatizaciones» como parte de los esfuerzos que le serán exigidos a cambio de esa ayuda. Y deberá adoptar un programa de austeridad presupuestaria hacia «mediados de mayo», indicó el jefe de fila de los ministros de Finanzas de la zona euro, Jean-Claude Juncker.  La adopción por Portugal de medidas de austeridad «ambiciosas» y de reformas económicas son «esenciales» para que ese país pueda beneficiarse del plan de ayuda internacional, declaró a su vez el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet. Ese «duro trabajo» debe «comenzar inmediatamente», añadió.  

Portugal se negaba a solicitar ayuda, pero el primer ministro socialista José Sócrates acabó por sucumbir a la presión de los mercados y anunció el miércoles que había decidido «enviar un pedido de asistencia financiera a la Comisión Europea», ante la  situación de las finanzas de su país.