POR LOYDA PEÑA
Los voceros de cuatro de los cinco partidos políticos representados en la Cámara de Diputados, coincidieron ayer en que la reforma fiscal pendiente de aprobación en el Congreso Nacional debe ser «estrictamente» compensatoria. Los dirigentes políticos consultados insistieron en que el momento no es propicio para más impuestos.

Christian Paredes, del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Ramón Rogelio Genao, del Reformista Social Cristiano (PRSC), José Ricardo Taveras, de la Fuerza Nacional Progresista (FNP), y Osvaldo Saldívar, del Revolucionario Social Demócrata (PRSD), además consideraron que el momento económico que vive el país no es propicio para gravar más a la población.

A los voceros de los bloques de diputados del PRD, PRSC, FNP y PRSC, así como también al del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Elías Serulle, se les preguntó por separado su opinión acerca del sentido final que entienden, debe tener la reforma fiscal que sometió el Poder Ejecutivo al Congreso Nacional y que cursa actualmente en la Cámara Baja.

«Nosotros creemos que la reforma fiscal debe ser, en primer lugar, un mecanismo que permita al gobierno obtener igualitariamente los recursos que dejará de recibir con la eliminación del recargo cambiario y otros impuestos, que tendrá que hacer con la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio (TLC)», dijo Paredes.

El vocero de la bancada del PRD consideró que, concomitantemente, la reforma fiscal que se apruebe debe incluir además algunas compensaciones para los sectores productivos nacionales. «En síntesis la reforma fiscal debe ser un instrumento de desarrollo del país».

Genao, por su parte, dijo que para poder cuantificar con exactitud los recursos que necesita recaudar el gobierno, la reforma fiscal debe conocerse conjuntamente con el presupuesto general y ley de gastos públicos previstos para el 2006.

El vocero del bloque de diputados del PRSC, afirmó que no se puede hablar de déficit o faltante (de dinero) si no hay un presupuesto en el que estén desglosadas «y debidamente justificadas» todas y cada una de las partidas contempladas en el mismo.

«En ese sentido, nosotros entendemos que la reforma que se vote sea un instrumento de desarrollo a mediano plazo, y no una solución aritmética en pesos y centavos, de un proyecto coyuntural», puntualizó.

De su lado, el vocero de la FNP, opinó que la reforma fiscal debe estar destinada «exclusivamente» compensar los RD$32,000 millones que el gobierno ha alegado dejará de percibir con la entrada en vigencia del TLC.

«Es decir, que se limite a sustituir los impuestos que han sido desmontados por el arancel fruto del TLC, de manera que no gravite negativamente en la población en momentos en que, evidentemente, hay cierta recesión», dijo Taveras.

Saldívar, por su parte, advirtió que el PRSD no va a votar por una reforma que amplíe la base del Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrializados y de Servicios (ITBIS), y mucho menos que grave los depósitos de los ahorrantes.

«La reforma fiscal debe tener un equilibrio entre lo que va a demostrar el gobierno y lo que se va a recaudar, y en el proyecto sometido por el Poder Ejecutivo, hay un superávit» aseguró el vocero de la bancada del PRSD en la Cámara Baja.

Para el vocero del bloque de diputados del PLD, sin embargo, la reforma fiscal a aprobarse en la Cámara de Diputados debe ser «lo más parecida posible» al proyecto original que envió el Poder Ejecutivo al Congreso, y que si se le quieren hacer algunas modificaciones, las mismas no sean «sustancial».

«Nosotros entendemos que lo que producido el Poder Ejecutivo en el marco fiscal, es legal, y que es con lo que ellos (el gobierno) entienden que pueden conducir bien al país el próximo año cuando entre en vigencia el TLC y todas las situaciones nuevas que hay, por lo que esperamos que los legisladores sean conscientes y separan madurar la idea en sus partidos, de que si se le hace alguna variación (a la reforma), no sea sustancia a lo que ha sometido el Poder Ejecutivo», concluyó Serulle.