Con una rotación de lujo y una clara superioridad ofensiva, los Filis de Filadelfia salen hoy a la Serie de Campeonato en búsqueda de su tercer pase consecutivo a la Serie Mundial.

El derecho Roy Halladay, quien lanzó no-hitter en su partido de la divisional, se medirá a Tim Lincecum, el pequeño que ponchó 14 jugadores de los Bravos en la primera ronda.

A Halladay le seguirán Roy Oswalt y luego Cole Hamels, que enfrentarán a Matt Cain y Madison Bumgarner, respectivamente.

Pero la verdadera diferencia de la serie está en la temible ofensiva de Filadelfia, que cuenta con figuras como Ryan Howard, Chase Utley, Jimmy Rollins, Shane Victorino y Jayson Werth, sin dejar de lado a Plácido Polanco, es lo que los pone arriba.

San Francisco no tiene grandes hombres de poder y las expectativas de que el dominicano José Guillén pueda responder luego de perderse toda la Serie de División debido a una lesión en el cuello se mantienen como un deseo anhelado del dirigente Bruce Bochy.

El único punto en el que San Francisco supera a Filadelfia es en el cerrador, donde Brian Wilson luce mejor que Brad Lidge, un hombre que ha enfrentado diversas molestias en los últimos tiempos aunque terminó por todo lo alto en la vuelta regular.

Comenzando en su casa, los Filis tienen una amplia ventaja y deben coronarse como los campeones de la Liga Nacional, llevando la serie, como mucho, a un máximo de seis encuentros, con una posibilidad más que latente de poder lograr la barrida.

Aunque en béisbol, por supuesto, no hay nada escrito.