FRANCISCO CRUZ PASCUAL
En uno de los artículos anteriores me referí a la perspectiva filosófica y decía que muchas personas piensan que no es necesario hablar de esta perspectiva para llegar a ser feliz, a través de una vida digna, íntegra y transparente.

Quiero enlazar la idea de ese artículo, para concluir con el tema de la perspectiva filosófica al tratar de aclarar la idea inconclusa del final de la entrega anterior. Esta perspectiva es una posibilidad que tenemos a nuestro alcance para evitar que las razones de nuestras acciones caigan en la acriticidad del dogmatismo.

Es bueno aclarar la perspectiva filosófica no sustituye las orientaciones morales, ni creencias ni convicciones. Esta perspectiva no desplaza, sino que fortalece esas creencias o convicciones transmitidas por los antepasados. Decimos que la perspectiva filosófica enriquece todo nuestro legado moral, porque descubre en ella la verdad que la sustenta, y saca a la luz las orientaciones mantenidas a través de los años.   

Para muchas personas hablar de estos temas es intrascendente, pero también muchos seres humanos sabemos que sin la práctica de estos temas la barbarie arroparía al género humano. Cuando hablamos de perspectiva filosófica nos referimos a la oportunidad que se nos ofrece para fortalecer la vida moral de las personas y de la sociedad, no a la especulación teórica.

La perspectiva filosófica es una garantía de que las normas y principios, es decir, nuestras obligaciones -deberes- sociales se cumplan bajo el orden de libertad que nos garantiza el mundo de hoy. El término “ética” trasladado del griego al latín -mos, morris- y el término “moral” que viene de esta raíz del latín, significa lo mismo que “ethos”, lo que en griego es igual a morada. En castellano usamos la palabra “ética” y “moral” para hablar del modo de ser, del carácter o la costumbre de los individuos. El diccionario sociológico define ética como reflexión filosófica que tiene por objeto la Moral, no como una moral concreta e histórica, sino como la dimensión moral de la vida. Así pues, teniendo en cuenta que pueden ser términos sinónimos y considerando que describen dos planos de análisis, podemos reservar el término Ética para describir la Filosofía Moral.

El mundo actual se debate entre la prisa y superficialidad de lo “Light”, lo que encanta a las grandes mayorías y la actitud de una minoría que cree en la reflexión, el comedimiento y la prudencia, en cuanto a la toma de decisiones acerca de temas cruciales para el futuro de la humanidad, tal cual hoy la conocemos. Para esta minoría, conservar al ser humano capaz de amar, es objetivo básico, conservar un mundo ecológicamente viable, es primordial y conjugar al hombre con la ciencia; siendo primero humano y luego cientista o técnico, el de primer orden.