POR RAYMOND COLITT
A cierta distancia, parece un negocio como otro cualquiera para los contrabandistas del Puente de la Amistad que cruza el río Paraná de Paraguay a Brasil. A través de un agujero en la cerca del puente arrojan los paquetes con cigarrillos y programas informáticos hacia la ribera que está abajo, desde donde se trasladan a almacenes cercanos.

Sin embargo, los traficantes se han sentido nerviosos en los últimos tiempos. Los asaltos por sorpresa de la policía han elevado las apuestas de uno de los mayores sistemas de contrabando de América Latina.

El volumen de productos que entran de contrabando del Paraguay libre de impuestos suministrados a los negociantes en las mayores ciudades de Brasil se estima que se ha reducido en los últimos meses. Al sentir los embates, los traficantes ocasionales protestaron recientemente y amenazaron a la Policía y los agentes de Aduanas. Los políticos presionaron a la Policía para que los dejara tranquilos, con el argumento de que la economía local estaba en peligro

Controles más firmes en Foz do Iguaçu, más conocido por sus magníficas cascadas, forman parte de la reciente ofensiva del gobierno brasileño por contener el contrabando. Es un cáncer que queremos erradicar, dice Geraldo Pereira, jefe de la Policía Federal en Foz. La policía ha confiscado 400 autobuses que se utilizaron para transportar productos de contrabando.

Un plan de acción de 100 puntos se inició el mes pasado por un equipo de trabajo de la policía pública después de que las presiones cada vez más intensas de los líderes de los negocios y los prestadores internacionales, que advirtieron que el contrabando creciente está debilitando los negocios legales y el crecimiento econòmico.

Además de Rusia y China, Brasil es el líder mundial en contrabando dijo Emerson Kapaz, jefe de Etco, un grupo que promueve la ética en los negocios. Afortunadamente, el país está despertando ante el problema.

El contrabando le cuesta al gobierno y al sector privado US$10 millardos anualmente, en ingresos que se pierden, de acuerdo con Etco.

Sin embargo, en sus esfuerzos por erradicar la pobreza, el gobierno de tendencia izquierdista del presidente Luis Ignacio Lula da Silva está descubriendo que el contrabando no es más que un síntoma de problemas mucho más amplios de un país en desarrollo.

Uno de ellos es que Brasil carece de los fondos y el personal para vigilar su enorme frontera adecuadamente. El señor Pereira dice que necesita 30 hombres para controalr el Puente de la Amistad. En la actualidad cuenta con cuatro.

Las autoridades planean contratar miles de agentes el año próximo pero comprenden las limitaciones del control de la frontera. Ni un batallón del ejército pudiera cerrar las fronteras al contrabando, dice Clecy Leonco, vice-secretario de ingresos internos.

Por el contrario, el objetivo es desmantelar las mafias, principalmente chinas y coreanas, que están detrás del contrabando.

Solo con inteligencia podremos romperle la columna vertebral, dice Luis Paulo Barreto, secretario ejecutivo del Ministerio de Justicia. Recientemente, la policía interceptó un embarque de 200,000 CD de un famoso cantante brasileño, hecho en China y embarcado por contenedor vía Europa.

Y mientras los productos de contrabando sean más fáciles y baratos de obtener, habrá demanda y suministro, dicen los expertos. El alza en los impuestos y la burocracia en los últimos años ha vuelto más caro los negocios legales. La carga total de impuestos ha subido de 25% a 36% del producto interno bruto desde inicios de los años 90. Cada aumento en los impuestos incrementa el incentivo para el contrabando, dice el señor Kapaz.

El problema es que no hay espacio para recortes tributarios en el futuro cercano, admite el Ministerio de Finanzas.

El gobierno espera iniciar campañas para concienciar a la población y advertencias a los consumidores sobre el costo social y la inferior calidad de los productos de contrabando y piratas.

Los críticos dicen que será una batalla cuesta arriba. Es difícil convencer a los consumidores a que paguen más en nombre del bienestar público, dice Eliane Lustosa, directora financiera de Ponto Frio. Uno de los mayores detallistas del país.

Otras ideas incluyen desarrollar productos de bajo costo, u ofrecer descuentos a los consumidores de contrabando, como los estudiantes, que son los principales clientes de la música en CD piratas.

Mientras que el combate al contrabando protege los empleos formales, elimina los informales. Sin contrabando, todo Paraguay estaría desempleado, dice el señor Kapaz.

Como resultado, el equipo de trabajo está pidiendo a la Organización de Naciones Unidas que proponga proyectos de desarrollo económico a lo largo de la frontera.

No todos los productos ilegales son contrabandeados. La industria de Brasil se está debilitando a la luz del día, mediante canales oficiales de importación en sus puertos principales dice Synesio Batista da Costa, jefe de la asociación de fabricantes de juguetes. Dice que el fraude en las aduanas ha permitido que los juguetes chinos capturen el 35% del mercado, 15% más de hace cinco años. Ellos declaran que 500 unidades cuestan cinco centavos en lugar de que 1,000 unidades cuestan 10 centavos.

Cuando los funcionarios de aduanas confiscan embarques sospechosos, los traficantes suelen conseguir órdenes judiciales para que los liberen. Nuestro problema principal ya no son las aduanas, sino el sistema judicial.

En noviembre de 2003, 45 oficiales de la policía de caminos fueron arrestados por supuestamente aceptar sobornos de los contrabandistas. Hoy, ya están todos de vuelta en sus puestos gracias mandatos de los tribunales y el problema continúa, dice el señor Pereira.

VERSION AL ESPAÑOL DE IVAN PEREZ CARRIÓN