POR AUTHERS
CIUDAD DE MÉXICO.- El Congreso mexicano vetó todos los cambios que el presidente Vicente Fox había propuesto para el presupuesto federal de 2005, lo cual propiciará un desafío constitucional en las cortes. La versión del presupuesto del congreso, que el señor Fox recientemente calificó de “inviable” se convertirá en una ley ahora, en efecto a partir del 1 de enero. La ley desviaba fondos de los costos de ministerios dirigidos por aliados del señor Fox hacia proyectos de inversiones, en varios casos, en estados controlados por gobernadores de la oposición.

Santiago Creel, ministro del Interior, dijo inmediatamente al señor Fox que desafiaría el presupuesto ante la Suprema Corte, quizás dentro de pocos días. Es poco probable que el asunto se decida antes de febrero.

“Recurrir a una controversia constitucional realmente no es deseable”, dijo el señor Creel. “Pero cuando en particular los intereses partidarios se colocan por encima de los intereses nacionales, es el momento de que la Suprema Corte decida qué es lo mejor para el país”.

El reto legal no tiene precedentes: la separación de poderes entre el Congreso y la presidencia no se sometió a prueba durante las siete décadas en las cuales el Partido Revolucionario Institucional (PRI) controló ambas ramas.

Fauzi Hamdan, presidente del comité de presupuesto del Senado y un asesor del presidente Fox, dijo que el asunto es si el presidente tiene poder de veto sobre el presupuesto y si es así, si esto permite el rechazo de partes específicas. Se verían afectados cerca de 10 aspectos del presupuesto, que representa una mínima proporción del total, dijo.

No está claro si el poder de veto del presidente sobre la legislación es válida para el presupuesto; técnicamente, un decreto aprobado por la Cámara Baja de diputados que no requiere la aprobación del Senado.

Vitali Meschoulam, estratega de HSBC en Nueva York, señaló que todos los partidos minoritarios se habían unido para rechazar las observaciones del señor Fox el martes por la noche, con más de los dos tercios necesarios para derrotar un veto presidencial. Aún cuando la corte sostenga el derecho al veto presidencial en el caso, el señor Fox todavía no podría derrocar el presupuesto de 2005

 “El hecho de que el voto de ayer ya señalara una derrota futura, de continuar el presidente con su determinación de echar atrás el presupuesto, coloca a Fox en una posición incómoda”, dijo el señor Meschoulam.

TRADUCCION: IVAN PEREZ CARRION