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EEUU reconsidera su estrategia en Irak

FINANCIAL TIMES <BR>EEUU reconsidera su estrategia en Irak

POR PETER SPEIGE
Con menos de tres semanas para que se produzcan las elecciones iraquíes, hay señales crecientes de que el Pentágono está reconsiderando por completo su estrategia en Irak; una revaloración que está teniendo impacto en todo, desde el presupuesto de defensa hasta la forma en que los soldados se despliegan en las zonas de combate.

La señal más visible de esto se produjo la semana pasada, con el anuncio de que un general de cuatro estrellas retirado, Gary Luck, dirigiría un equipo para valorar la operación encabezada por EEUU en Irak.

El Pentágono insiste en que la misión del general Luck está limitada a evaluar la continuación de la lucha por hacer más efectiva la seguridad de las tropas iraquíes.

Sin embargo, funcionarios de la administración, incluyendo al presidente George W. Bush, han indicado que el grupo de trabajo tiene un programa más amplio, y que podría recomendar cambios más radicales.

El Pentágono ha mantenido los labios cerrados ante el ímpetu de la reevaluación, y ha declinado hacer comentarios sobre si fue solicitado por los comandantes de campo por Donald Rumsfeld, el secretario de Defensa.

Un vocero del señor Rumsfeld dijo: «Si resulta que todo el mundo se siente bien con la forma en que marchan las cosas, va a haber miles reclamando el crédito. Si resulta que es menos útil de lo que deseaban otros que fuera, todos van a culpar a Rumsfeld».

No obstante, la nueva visión del Pentágono se produce en medio de señales crecientes de que el desgaste militar, en particular del Ejército -que se pronosticó hace tiempo por lo extendido y la alerta intensidad de las rotaciones en Irak-, pudiera estar mostrando los primeros signos de un impacto.

Esto resulta mucho más evidente en la Guardia Nacional y las reservas, soldados a medio tiempo que ahora constituyen cerca de 40% de las tropas estadounidenses en Irak.

El mes pasado, el general que dirige las reservas del ejército se quejó en un memorándum a sus superiores que las actuales políticas de desplazamiento significaban que las unidades «están generando rápidamente en una fuerza `fragmentada´».

El memo, que fue ampliamente divulgado por los medios, provocó nuevas críticas de los principales miembros del Congreso, incluyendo los republicanos.

«No hay dudas de que estamos poniendo en tensión las fuerzas de nuestra guardia en esta coyuntura, al igual que las reservas», dijo Bill Frist, el líder republicano del Senado. «Las misiones reiteradas, el regreso a casa después de un tiempo breve, aumenta las tensiones sobre ellos».

Aunque el Pentágono ha estado renuente a discutir el asunto, también hay indicios de que las tropas desplegadas a tiempo completo también están luchando por cumplir con sus compromisos, Documentos relativos al presupuesto obtenidos por el Financial Times y otras organizaciones de medios este mes, muestran que se van a reenviar hacia el ejército los grandes recortes en los programas de armamentos de alta tecnología propuestos por la oficina del secretario de Defensa.

El Pentágono insiste en que cualquier dinero nuevo que entre al ejército se empleará en la «transformación» -el eufemismo que se emplea para describir los esfuerzos de hacer del ejército una fuerza más ligera y más fácilmente desplegable-.

Sin embargo, los expertos consideran que gran parte de ese efectivo adicional va a terminar siendo utilizado para mantener y reparar equipo militar dañado por el prolongado tiempo en Irak.

Detrás de gran parte de las preocupaciones renovadas está una apreciación cada vez más oscura de las fuerzas de seguridad iraquíes. Aunque los comandantes de EEUU han alabado sus esfuerzos en público, particularmente el asalto a Faluya en noviembre, los expertos que han estudiado las tropas iraquíes dijeron que esos logros se limitaron a unas pocas unidades especializadas. En general, las fuerzas de seguridad iraquíes siguen sin llenar las expectativas.

Walter Slocombe, quien supervisó la reconstrucción inicial del ejército iraquí durante la Autoridad Provisional de Coalición, dijo: «El avance, aún en las cosas más simples, es mucho más lento de lo que hubiéramos esperado y no estoy seguro de que se conozca el por qué».

El reemplazo de las fuerzas de EEUU mediante el mejoramiento de las unidades de seguridad iraquíes, sigue siendo la primera estrategia de salida de EEUU. Pero con un avance tan lento, los planificadores del Pentágono se han visto obligados a considerar un despliegue mucho más prolongado de tropas norteamericanas, a pesar de que encuestas recientes arrojan una oposición creciente a la guerra entre los electores.

Altos funcionarios del Pentágono ya han reconocido que se están analizando varias opciones. Sin embargo, han declinado especificar si las recomendaciones específicas que se están murmurando en público -incluyendo un incremento permanente en el ejército en 30,000 soldados, o la extensión del tiempo de reclutamiento de los reservistas a más de dos años-, están sometidas a consideración.

Dijo un vocero del Pentágono: «El Ejército está valorando actualmente todas las demás opciones que se pueden ejecutar temporalmente. Es decir, que se sigue pensando, y cuando se está pensando, hay muchas filtraciones; y cuando hay filtraciones se dan muchas noticias sin valor».

TRADUCCION: IVAN PEREZ CARRION

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