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Mercados: Los conservadores ansiosos por decir: “Te lo dije”

FINANCIAL TIMES <BR>Mercados: Los conservadores ansiosos por decir: “Te lo dije”

POR PHILIP COGGAN
Los “toros” agresivos del mercado están en alza. Ahora creen que el mundo está en una subida del ciclo clásico, en el cual las economías y las ganancias son fuertes y las acciones corrientes superan a los bonos.

Quizás la indicación más firme de que los inversionistas creen en una economía global boyante es la fortaleza de las acciones corrientes de los mercados emergentes. El índice MSCI de Mercados Emergentes llegó a alturas récord en las últimas sesiones. Las compañías de los mercados emergentes dependen intensamente de las exportaciones y de las materias primas y de ahí que con frecuencia representen una pieza en el engrane del crecimiento global.

Más evidencias del criterio de un rebote global han sido la fuerte subida en los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos.

Los que creen en una desacleración tienen menos elementos en los que confiar. El índice Baltic Dry, visto como un indicador de la actividad comercial global, ha bajado dos tercios de su pico. Pero esta medida de tasas de embarques parecen haber caído debido a un influjo súbito de suministros pedidos por los dueños de barcos en respuesta a la demanda de china en 2003-2004.

De manera similar, una baja en los precios del acero parece resultar de la súbita emergencia de nuevos suministros chinos. La materia prima más importante de todas, el petróleo, ronda los US$60 el barril, indicando que no hay escasez de demanda global. Mientras tanto, el cobre está en una altura histórica, y el platino cerca de alzas de 23 de años.

Los “osos” conservadores dependen de argumentos a plazos más largos para justificar su pesimismo. Su argumento es que los mercados de activos se han mantenido a flote por una  política monetaria suave. Al contrario, la fortaleza de los precios de activos, particularmente la vivienda, ha vuelto confiados a los consumidores en cuanto al gasto.

Aunque la Reserva Federal ha estado ajustando la política monetaria durante más de un año, sigue considerando su política “acomodaticia”. En otras palabras, la política sigue animando el crecimiento económico, en lugar de restringirlo.

Hasta en el Reino Unido, donde las autoridades han decidido que la política pudo haber sido demasiado ajustada, las cifras de suministro de dinero indican que hay mucha liquidez en la economía.

El argumento conservador es que esta situación no puede durar eternamente. Al permitirle a los consumidores y gobiernos contraer mayores deudas, los economistas le han “pedido prestado” crecimiento al futuro. Los peligros potenciales de un choque también son mayores.

Incluso, alzas modestas en las tasas de interés en el Reino Unido parecen haber rebajado la inflación en los precios de la vivienda con fuerza. Y aunque el mercado inmobiliario se ha estabilizado, en lugar de caer, el gasto minorista parece haberse desacelerado también de manera significativa. Sin embargo, el mercado inmobiliario parece estar en la función “burbuja”, o “espuma”, como prefiere la Fed.

También puede que pase algún tiempo antes de que otro problema a largo plazo –el déficit de cuenta corrientes de EEUU– se corrija. La reciente revaluación china habrá importado poco para el déficit, o para la situación fundamental. Los países asiáticos están felices de vender productos a EEUU y de prestarle dinero a los norteamericanos para que le compren sus productos –una forma internacional de financiamiento del vendedor.

Y en la medida que aumenta el déficit, así lo hace la deuda externa de EEUU, y de ahí los costos de su financiamiento. Será un problema al final, pero los inversionistas no parecen preocuparse por ello por el momento. Tampoco parecen estar preocupados por el precio del petróleo. Si se le hubiera dicho a los inversionistas al comenzar el año que el petróleo se iba a estar comerciando por encima de US$60 el barril en agosto, puede que se hubieran imagina cierto efecto económico sustancial. Pero por el contrario, el alto precio del petróleo se considera un síntoma de una fuertes demanda global.

Después de desechar estas preocupaciones, los “toros” alegan que las acciones corrientes se ven baratas. En Europa, los rendimientos de los dividendos están bastante cerca de los rendimientos de los bonos, lo que indica que los inversionistas no están descontando mucho en la forma de crecimiento de dividendo.

HSBC alega que el mercado de EEUU está negociando en una razón perspectiva precio/ganancia de 17 “que en el papel al menos no es un precio alto para pagar por un mercado cuyas compañías pueden dar un retorno sobre las acciones de alrededor de 15% conjuntamente con una tendencia de crecimiento de 5%-6%.

Lo que me pone nervioso son algunas de las medidas de valuación a largo plazo. James Montier, estratega global de Dresdener Kleinwort Wasserstein, señala que la perspectiva promedio a largo plazo p/g (basado en las ganancias operativas) fue de 12.5 Otras medidas como una relación p/g ajustada al ciclo, precio por libro y rendimiento de dividendo deja al mercado norteamericano muy sobrevaluado. Un promedio de nuevas mediciones escogidas por el señor Montier sitúa la sobrevaluación en 59%. Los inversionistas deberían tener esas medidas en mente antes de ponerse demasiado agresivos en los mercados de acciones globales.

VERSION AL ESPAÑOL DE IVAN PEREZ CARRION

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