¿Podrá Japón superar pronto a Estados Unidos como el Número Uno? En el crecimiento económico, no. Sin embargo, en las posiciones de los fabricantes de autos, la perspectiva parece cercana. El año pasado, Toyota superó a Ford para convertirse en el segundo fabricante de vehículos en cuanto a ventas. Ahora está persiguiendo a General Motors, el grupo mayor. Esta semana, Toyota pronosticó que sus ventas subirían 75 el año próximo, a 8,03 millones de vehículos. También prometió vender 8,5 millones en 2006, igual que GM.  

Además, en las medidas que realmente le importan a los inversionistas, Toyota está muy adelante. En los primeros nueve meses de este año, sus ganancias fueron más o menos las mismas de los “Tres Grandes” fabricantes norteamericanos juntos. Toyota, a diferencia de los Tres Grandes, no ha estado ofreciendo cuantiosos incentivos de ventas este año en EEUU, donde ahora cuenta con el 12% del mercado.

El año que viene, Toyota podría potencialmente enfrentar algunas baches. EEUU significa solo alrededor de un tercio de sus ventas globales, pero constituye la tajada del león en las ganancias. Sin embargo, Toyota todavía depende de componentes producidos en Japón en un grado sorprendentemente elevado: Credit Suisse First Boston estima que se importó el equivalente de 1 millón de vehículos el año pasado, cerca de la mitad  de todas las ventas. De ahí que un alza de Y1 frente al dólar reduzca las ganancias entre Y20 millardos- Y25 millardos.

El otro problema es el acero. La escasez del metal ya obligó a Nissan a suspender la producción temporalmente. Otros grupos japoneses, como Suzuki, esperan tener limitaciones en la producción a comienzos del año próximo. Toyota espera evitar eso reduciendo la cantidad de acero empleado en cada vehículo y comprando a terceros, fuera de Japón. No obstante, esto también pudiera afectar los márgenes en 2005..

De todas formas, mientras más se obligue a Toyota a modificar sus procedimientos para abastecerse -y, finalmente, a subir la producción en EEUU-, podrá convertirse en un competidor más formidable. Toyota espera incrementar sus ventas en 5% en EEUU el próximo año, aunque pronostica muy señaladamente que el mercado en general estaría plano. Con promesas como esas, los Tres Grandes no deben esperar que se alivien las presiones en año que viene.

TRADUCCION: IVAN PEREZ CARRION