Emiko Terazono
Londres. La industria global de fertilizantes enfrenta un gran superávit en un momento en que las nuevas plantas de producción entran en funcionamiento después de un brote de inversión de $90 millardos, provocado por el auge de materias primas.

La Asociación Internacional de Industrias de Fertilizantes (IFA, por sus siglas en inglés), el grupo radicado en París que tradicionalmente pinta una perspectiva optimista para la industria, ha resaltado el impacto de la capacidad excesiva.

Este advirtió sobre “grandes superávits potenciales” para el 2015 en los fertilizantes de nitrógeno y dijo que la industria de potasio sólo evitaría los “enormes superávits” debido a una posible demora en los proyectos.

La pesimista visión llega solo cinco años después que la industria de fertilizantes entró bajo el foco de atención siguiendo la crisis alimentaria global de 2007-08, cuando el precio de las materias primas, como el potasio, se elevó en diez veces hasta casi $1,000 la tonelada.

Los precios de los fertilizantes colapsaron durante la crisis financiera, pero la industria todavía observó y libró unas de las más fuertes batallas en el sector de recursos naturales en los últimos años. 

BHP Billiton propuso $39 millardos para PotashCorp en el 2010, en una adquisición hostil que fue reducida por las autoridades canadienses.

El movimiento de la empresa minera siguió a una batalla de propuestas, donde el fabricante de nitrógeno de EEUU CF Industries ofreció $5 millardos por el rival Terra Industries, sólo para encontrar por sí mismo el objeto de una propuesta hostil del grupo canadiense Agrium.

Vale de Brasil gastó aproximadamente $5 millardos en el 2010 comprando activos de fertilizantes del comerciante de materias primas listado en Nueva York de nombre Bunge y también del productor de Potasio The Mosaic Company.

Aunque el precio de los productos fertilizantes ha bajado significativamente desde sus picos, todavía están en niveles históricamente altos.

El potasio se está comerciando a $469 la tonelada en el mercado, por debajo de casi $1,000 en el 2008, pero encima de los hasta menos de $200 en el 2005.

Urea, una forma de fertilizante de nitrógeno, que llegó a un alza de $800 la tonelada en el 2008, está ahora en $540 la tonelada, muy por encima de casi los $200 vistos en el 2005.

Los altos precios han atraído nuevos entrantes en el sector y provocó que los grupos existentes se expandieran, dijeron los analistas. “Si los precios quedan demasiado altos por mucho tiempo, eso motivará más producción”, dijo Oliver Hatfield, director de fertilizantes de la consultora Integer Research de Londres. 

La IFA dijo que aproximadamente 250 nuevas plantas de fertilizantes están proyectadas a entrar en funcionamiento en los próximos cinco años.

La Asociación estima que los planes de expansión impulsarán la capacidad global de nitrógeno de 17-25% para el 2015 desde el 2011. Respecto el potasio, las compañías han elaborado ambiciosos planes de crecimiento.

La IFA además agregó que la capacidad mundial podría aumentar un 42% en el mismo periodo mientras la demanda se espera que se extienda sólo por un 14% para el 2015.

La OPEP mantiene limitada producción de petróleo

Guy Chazan

Viena.  Opep acordó mantener su límite de producción sin cambiar, aunque los analistas todavía esperan que Arabia Saudita y sus aliados del Golfo reduzcan la producción en caso de que los precios continúen cayendo.

Los ministros del cartel de productores petroleros se reunieron en el contexto de una fuerte disminución en el precio del crudo y la incertidumbre sobre la demanda del petróleo. Antes de la reunión, la mayoría de delegados dijeron que dicho precio podría ser dejado sin cambio.

El crudo ha bajado desde el pico de $128 el barril en marzo hasta debajo de $100 en el presente, a medida que la crisis de deuda de la eurozona, la vacilante recuperación en Estados Unidos  y una depresión en La India y China socavan la demanda del producto.

También hay cuestionamientos sobre el suministro, especialmente una vez que las sanciones de la Unión Europea  contra Irán en relación al programa nuclear del país entren en efecto en julio.  Arabia Saudita, que ha estado bombeando petróleo a alzas de 30 años, ha sido culpada por algunos miembros de Opep por causar la disminución del precio.

El reino incrementó la producción este año en un aparente esfuerzo por recuperar cualquier baja en las exportaciones iraníes cuando las sanciones comenzaron a afectar. “Algunos países miembros podrían reducir su producción”, dijo el ministro petrolero iraní, Rostam Ghasemi.

Dirigiéndose a los delegados, el president del Opep, Abdul-Kareem Luaibi Bahedh, ministro petrolero iraquí, describió el nivel de volatilidad del precio del metal como “perturbador” y un “asunto de preocupación para nosotros”.

Dijo que el crudo recientemente bajó en $9.95 el barril en sólo cuatro días.

José María Botelho de Vasconcelos, el ministro petrolero de Angola, dijo que los estados miembros querían un precio de entre $100 y $110 el barril”, un precio que él dijo que era innecesario para justificar las inversiones en áreas tales como los campos salinos de Brasil y las afueras de Angola.

Opep acordó en su última reunión en diciembre un límite de producción de 30 millones de barriles. Pero ya está produciendo 1.6 millones de barriles diarios más, de acuerdo a sus propias cifras.

No obstante, cualquier  intento de llegar con un nuevo número es posible que pueda fiscalizar el cartel, que a menudo lucha por encontrar consenso.

Hani Hussain, ministro petrolero de Kuwait, dijo que era “demasiado temprano” para cambiar el objetivo de producción. Pero cualquier discusión sobre los objetivos es teórica, dijeron los analistas.

La mayoría de estados de Opec están produciendo a toda máquina, con Arabia Saudita, Kuwait y los Emiratos Árabes Unidos, siendo los únicos tres con la capacidad de producción adicional para incrementar o reducir la producción como se necesite.

VERSIÓN AL ESPAÑOL DE ROSANNA CAPELLA