La Fundación Institucionalidad y Justicia (FINJUS) rechazó ayer las declaraciones del presidente Hipólito Mejía cuando dijo que rogaba porque el país no quede en manos de la sociedad civil y dijo que muchos de sus miembros andan en busca de cargos.

Tras calificar de injustas las palabras del mandatario, José Alfredo Rizek, director ejecutivo de Finjus, dijo que esas declaraciones no reflejan la realidad.

Adujo que el mandatario pretende descalificar el papel que desempeñan organizaciones como Finjus, las cuales sólo pretenden contribuir a que la sociedad marche correctamente y no sustituir a los partidos políticos.

Rizek subrayó que ninguno de los directivos de Finjus anda en busca de cargos en el gobierno.

«Nosotros nos sentimos contentos y satisfecho con el trabajo de colaboración que nos permiten los distintos espacios de opinión y de debates. Entendemos que los mismos son suficientes para hacer sentir nuestra opinión», dijo Rizek.

Entrevistado en el programa El Día, el presidente Mejía defendió la Ley de Lemas y resaltó el papel de los partidos como soportes de la democracia. Al rechazar las criticas a la iniciativa del diputado Henry Sarraf, el mandatario dijo que muchos de la sociedad civil «están en busca de cargos», y exclamó: «ay de nosotros si lo dejamos a la sociedad civil».

Empero, el director de la FINJUS dijo que el presidente usa estas expresiones para descalificar, lo cual demuestra que el presidente de la República y aspirante a reelegirse en el cargo, no tiene argumentos para justificar sus aspiraciones y responder a los planteamientos de la sociedad civil.

Agregó que a Mejía «le faltó aclarar que el poder es para usarlo, sí, pero dentro de los cánones legales y sin atropellos».

Adujo que los planteamientos de la sociedad civil son muy ponderados y específicos y que requieren de una respuesta ponderada, específica, ponderada.

Rizek deploró que el mandatario utilice estos argumentos, en momentos en que el país se debate la reforma a la ley electoral, en lugar de plantear sus razones y defender su posición.

Aseveró que el presidente no ha utilizado -hasta ahora- ningún argumento de ideas, ningún razonamiento técnico que justifique una modificación a la Ley Electoral.

El presidente -dijo Rizek- se ha limitado a decir que internamente en el PRD aceptó la sumatoria de votos, y que si tiene que imponerse (en las elecciones nacionales) se va a imponer, «pero ninguno de esos son argumentos técnicos, son sencillamente expresiones que no contribuyen al debate, y por el contrario lo van a politizar y radicalizar».

Consideró que aún falta mucho para que los políticos comprendan el papel que debe jugar la sociedad civil y muchas veces se confunde a la opinión pública.

Explicó que las organizaciones de la sociedad civil no aspiran a sustituir a los partidos políticos, pues estos tienen su espacio que se relegitima cada cuatro años en las elecciones.

Subrayó que las entidades como Finjus no aspiran a sustituir a los partidos, sino a tener un espacio de opinión y contribuir a resolver los problemas de la República Dominicana.

Recalcó que para defender el bienestar colectivo y demandar el respeto a la institucionalidad y el estado de derechos no es preciso ocupar cargos en el gobierno.