La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) advirtió ayer sobre la necesidad de que cualquier cambio en el calendario electoral, con miras a posponer las elecciones congresionales y presidenciales del 17 de mayo, sea una decisión ponderada y con el consenso de la Junta Central Electoral y los partidos.
El vicepresidente ejecutivo de la entidad, Servio Tulio Castaños, dijo que la medida no debe ser precipitada, a fin de reforzar la institucionalidad y el ejercicio pleno de la democracia en el país.
“La pandemia del coronavirus ha afectado el país en todas las áreas. Desde el punto de vista institucional nos preocupa la situación de las instituciones democráticas, debido a que el fenómeno ocurre en medio del proceso de renovación de la representación popular en el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo”, expresó Castaños en una nota.
Agregó que el rápido desarrollo de Covid-19 en el mundo ha significado que los calendarios electorales de numerosos países se hayan modificado, en base a las advertencias de la Organización Mundial de la Salud.
Dijo que entre las naciones que han pospuesto elecciones nacionales están Australia, Canadá, Argentina, Perú, Bolivia, Serbia y Macedonia, así como los comicios estatales, municipales o locales en Estados Unidos, Reino Unido y Francia.
Manifestó que si no es posible realizar elecciones antes del 16 de agosto el país estaría ante un vacío normativo que debe ser analizado de forma cuidadosa, por los sectores involucrados y en última instancia por la sociedad.
Señaló que la necesidad de minimizar los riesgos del contagio comunitario del coronavirus obliga a rediseñar el calendario electoral y suspender los comicios de mayo próximo.