El vicepresidente ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), Servio Tulio Castaños Guzmán, consideró ayer que una de las principales prioridades del sistema democrático nacional ha sido el fortalecimiento de la justicia constitucional.

 En ese sentido dijo que la  jurisdicción constitucional constituye el principal instrumento de garantía para la efectiva realización de los principios de supremacía e integridad de la Constitución, de las bases del sistema democrático y del orden de valores que conforman el Estado de derecho.

“La adopción, en el marco de la reforma constitucional, de un Tribunal Constitucional con carácter autónomo e independiente, se convierte en un paso trascendental para impulsar las grandes transformaciones institucionales que ordena la Constitución y se convierte en un guardián de los derechos fundamentales de todos los habitantes del país”, destacó Castaños.

Recientemente el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Jorge Subero Isa, reiteró su vaticinio de que la citada jurisdicción llevará la justicia dominicana a un caos en el que los pleitos judiciales nunca acabarían.

Cree que la atribución que tendría el Tribunal Constitucional, de revisar las decisiones de la SCJ, expondría al peligro la seguridad jurídica.

Las claves

1. “No habría caos”

El Procurador General de la República, Radhamés Jiménez Peña, dijo que con la entrada en funcionamiento del Tribunal Constitucional  podría experimentarse algunas dificultades, pero no se crearía ninguna situación caótica, como la que pronostica  Subero Isa.

2. Juego de democracia

EL jefe del Ministerio Público dijo que se podrían presentar algunas dificultades, pero no caos, porque no ha ocurrido en otros países que tienen el sistema.  “En todas partes del mundo los tribunales constitucionales funcionan de manera unísona. Pudieran surgir choques naturales, ha sucedido en España, pero efectivamente ese es el  juego de la democracia donde las instituciones son fuertes, transparentes y funcionan, eso es así”.