La Fundación Institucionalidad y Justicia, (Finjus) respaldó ayer el proceso de depuración interna de los miembros de la Policía Nacional que están involucrados en hechos criminales, y dijo que ese es un paso de avance que debe ser saludado por toda la ciudadanía.
Sin embargo, señaló que ninguna iniciativa en ese sentido será eficaz si los cancelados por mala conducta no son sometidos a la justicia, y si no se eficientiza la inspección interna.
En un documento que firma su vicepresidente ejecutivo, Servio Tulio Castaños Guzmán, la entidad dice que no es posible que los encargados de custodiar la seguridad ciudadana y perseguir el crimen terminen involucrados en actividades delictivas,
Recordó que la autoridad con que están revestidos como agentes del orden, los obliga a ser los primeros y más respetuosos de la Constitución y las leyes.
El delito cometido por un agente policial constituye una desviación total a la función de protección asignada a la Policía Nacional y, como tal, debe ser sancionada drásticamente conforme a derecho, agregó Castaños Guzmán.
Sometimiento justicia. Castaños Guzmán afirmó que la cancelación debe ser solo el primer paso, puesto que todo integrante de la Policía cancelado por la comisión de conductas reñidas con la ley debe ser automáticamente sometido a la acción de justicia para evaluar su respectiva responsabilidad.
Indicó que es tiempo ya de superar la práctica de cancelar y dejar libres de responsabilidad ulterior a los agentes involucrados en hechos criminales.
Señaló que en esa tarea el Ministerio Público debe jugar un rol enérgico en sustentar las acusaciones que correspondan, y la Policía Nacional brindarle especial apoyo para estos fines.
El efecto disuasorio de la cancelación no se logrará a plenitud si los agentes que incurren en inconductas no son juzgados en el marco del debido proceso de ley ni se les impongan las penas respectivas a quienes resulten culpables de violar la ley penal, señaló el vicepresidente ejecutivo de Finjus.
Hay que supervisar. Castaños Guzmán sostuvo que la Policía Nacional debe además reformar y fortalecer la supervisión interna, y monitorear permanentemente el comportamiento.
Cancelados
La reacción de la FINJUS se produce luego del anuncio hecho por la Policía que había cancelado 46 miembros de la institución por mala conducta, entre ellos, seis oficiales que fueron investigados por el atentado que sufrió el abogado de Santiago Jordi Veras, y también por el asesinado del teniente general Virgilio Casilla Minaya, ocurrido en esta Capital.
Diversos rangos
Entre el grupo de miembros separados de las filas de la Policía, algunos de los cuales fueron traducidos a la justicia, hay cinco mayores, seis capitanes, seis primeros tenientes y once segundos tenientes, según informó este domingo la jefatura de la Policía a través de su vocero.