La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) y el precandidato presidencial Luis Abinader hicieron ayer causa común con las preocupaciones y las advertencias que desde el púlpito hizo la Iglesia católica sobre la realidad que está viviendo el país.
El alto clero católico tocó puntos neurálgicos que afectan a la sociedad dominicana a través del Sermón de las Siete Palabras, que fue pronunciado el Viernes Santo.

Para la Finjus, el contenido de la homilía es, sin lugar a dudas, “ un grito de alerta” dirigido a todos los responsables de instituciones del Estado, y a quienes orientan a la sociedad desde sus respectivas obligaciones u oficios, “para que hagamos conciencia de la urgencia e importancia de encarar con seriedad cada uno de los problemas enunciados”.
Y es que, en su alocución religiosa, los sacerdotes criticaron la corrupción; la “intolerancia” de parte del Gobierno frente a quienes disienten; a los que ponen los intereses personales o de un partido por encima del proyecto de nación; y a los que “con intensiones mezquinas pretenden perpetuarse en el poder”, entre otros temas.

Servio Tulio Castaños Guzmán, vocero de la Finjus, afirmó que cualquier persona con sensibilidad percibe las señales de deficiencias institucionales que han estado presentes en los últimos años en la sociedad dominicana, y que en las últimas semanas, de acuerdo a la percepción de amplios sectores, “se han agravado dramáticamente, arrojando sombras sobre el futuro inmediato de nuestra democracia”.
Agregó que aunque en su prédica los sacerdotes no dejaron fuera los peligros del agravamiento de la inseguridad ciudadana; el aumento de la pobreza, la falta de servicios básicos; los feminicidios, el drama de las adolescentes embarazadas y otros problemas no menos gravosos, para la Finjus el más preocupante es el de la crisis en la calidad de la democracia”.

“El llamado a preocuparnos por el Estado de derecho, y especialmente por reanimar una justicia que parece inmóvil e incapaz de castigar la gran corrupción, no debe caer en el vacío. Estamos en un momento decisivo para avanzar en la consolidación de la democracia. El apego al debido proceso, el respeto a las leyes y la Constitución resuenan en todo el país en esta nueva edición del Sermón de las 7 Palabras.”, dijo Castaños Guzmán.
Abinader. Afirmó que el énfasis puesto por la Iglesia católica frente al deterioro ético e institucional, y las amenazas que se ciernen sobre la democracia dominicana, constituyen un emplazamiento a todos para introducir cambios de políticas y conductas.
Dijo que es muy alentador que en sus alertas y recomendaciones los sacerdotes católicos hayan subrayado que la separación de los poderes del Estado es indispensable para cimentar una democracia cabal, y recordó que eso ha sido parte esencial de su planteamiento político y social.
“Nos satisface el énfasis que pone la Iglesia en el respeto al marco de convivencia civilizada que debe pautar la Constitución de la República, imponiéndose a todos, gobernantes y gobernados, como un contrato social que no debe ser reformado para satisfacer intereses coyunturales y particulares”, precisó Abinader.
En ese sentido el dirigente del partido opositor reiteró su advertencia “ sobre la desestabilidad e ingobernabilidad que provocaría un intento de imposición que mancille la Constitución”.

Consideró necesaria y urgente la concertación de una amplia unidad política y social, basada en un serio compromiso de nación, inspirado en los mejores valores y los más anhelados sueños de la familia dominicana, “antes de que sea demasiado tarde”.
Tanto la entidad de la sociedad civil (FINJUS) como el dirigente perremeísta, ofrecieron sus declaraciones a través de documentos de prensa.