La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) emitió su consideración y preocupación sobre la Ley 340-06, sobre Compras y Contrataciones de Bienes, Servicios, Obras y Concesiones, a la que le atribuye ser uno de los cimientos principales del modelo clientelista que ha imperado en el sistema político dominicano y ha permitido la aparición de múltiples distorsiones e inconsecuencias que se han mantenido a lo largo de la última década.

La opinión de la entidad fue enviada al Congreso Nacional, a la Comisión de Hacienda del Senado que estudia la reforma de la iniciativa, a través de su presidente, senador Milcíades Marino Franjul Pimentel.

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En su reflexión y análisis del proyecto, el vicepresidente ejecutivo de Finjus, Servio Tulio Castaños Guzmán, aboga por la modernización del sistema de compras y contrataciones públicas, con una transformación institucional.

Indica que tras quince años de aplicación, la ley ha resultado incapaz, ineficaz e ineficiente para regular, dirigir y servir de marco a la acción del Estado para el uso óptimo y la transparencia en el uso de los recursos públicos y el logro de los objetivos de la administración central.

Critica que no están garantizadas las capacidades plenas del ejercicio de las funciones de la Dirección General de Compras y Contrataciones.

Además, pide una explicación más precisa de la Dirección General de Contrataciones Públicas sobre los contratos de concesión, debido a que han generado múltiples desviaciones en materia de corrupción.