La Fundación Institucionalidad y Justicia, Inc. (Finjus) sugirió al Consejo Nacional de la Magistratura que inicie su cronograma de trabajo   con la evaluación de los miembros de la Suprema Corte de Justicia y la elección de los magistrados que vendrán a ocupar las vacantes existentes.

Como es conocido, el Consejo Nacional de la Magistratura, inmediatamente quede instalado y sean aprobados los reglamentos que ordena su Ley Orgánica, debe proceder a la elección de los jueces que integrarán la Suprema Corte de Justicia, el Tribunal Supremo Electoral y el Tribunal Constitucional.

Para la FINJUS el orden en que sean electos dichos órganos tiene un alto significado para asegurar la transparencia y legitimidad que se requiere para que los mismos sean recibidos por la sociedad dominicana como la expresión del adecuado funcionamiento del Consejo Nacional de la Magistratura, que por su composición es un órgano compuesto por representantes de los poderes del Estado, con un alto componente político, que en nuestro ordenamiento se encarna en la voluntad partidaria.

El hecho de que en el Consejo Nacional de la Magistratura se expresen esas voluntades políticas partidarias no impide exigir objetividad y responsabilidad en sus decisiones, sobre todo por el hecho de que existen dos representantes del Consejo Nacional de la Magistratura que no forman parte de la estructura político-partidaria mencionada.

Ellos son los dos jueces de la Suprema Corte de Justicia, que han de representar la voz institucional del Poder Judicial y que encarnan la cuota de un poder del Estado, a quienes se debe garantizar que sus acciones no puedan ser interpretadas como el producto de simpatías partidarias ni el resultado de sus presiones.

Por lo anterior, en vista de que la actual Constitución, en su Cuarta Disposición transitoria, dispone que “los  actuales jueces de la Suprema Corte de Justicia que no queden en retiro por haber cumplido los 75 años de edad serán sometidos a una evaluación de desempeño por el Consejo Nacional de la Magistratura, el cual determinará sobre su confirmación”, la Fundación Institucionalidad y Justicia sugiere al Consejo Nacional de la Magistratura, en base a la prudencia política, que inicie con la selección de las Altas Cortes, conformando a los miembros de la Suprema Corte de Justicia.