La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) calificó ayer como “inoportuna” y “contraproducente” la intervención del gobierno en el conflicto entre la empresa Chevron y el Sindicato de Choferes Transportadores de Petróleo.

Afirmó que con su intervención para que el Sindicato de Transportadores de Petróleo levantara el bloqueo del suministro de los combustibles, el Poder Ejecutivo “traspasó la línea de sus atribuciones” para intervenir en asuntos que por su naturaleza privada, se dirimen actualmente en los tribunales.

Recordó que la Cámara Civil y Comercial del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Judicial de San Cristóbal,  mediante sentencia ordenó  el levantamiento de la huelga, y que sus promotores, en un abierto desafío al estado de derecho y al ordenamiento jurídico, dijeron que no lo harían.

“En lugar de proceder a ejecutar la sentencia mediante la eliminación del bloqueo declarado ilegal de conformidad con las leyes y el debido proceso, en un acto inaudito, el presidente y el vicepresidente de la República recibieron a los transportistas y choferes, e iniciaron una mediación dándole  seguridades  que sus demandas serían satisfechas”, dijo la entidad en un documento.

Agregó que más grave aún es que las autoridades fueron incapaces de ejecutar la referida sentencia.

FINJUS
Para la Fundación Institucionalidad y Justicia, la manera como ha intervenido el Poder Ejecutivo en el caso de la Chevron y los transportistas ha sido inoportuna y contraproducente.