El presidente no está investigado, pero los acusados pertenecen a su entorno cercano. Y Castillo respondió 40 preguntas de un fiscal
La fiscalía peruana asiste el martes al palacio presidencial para interrogar al mandatario peruano Pedro Castillo en una investigación por presunto favoritismo en ascensos de militares. El presidente no está investigado, pero los acusados pertenecen a su entorno cercano.
Esta la primera vez durante su mandato que Castillo -en calidad de testigo y no de acusado- será interrogado por un fiscal.
La Fiscalía investiga si un exasesor presidencial y un exministro de Defensa de Castillo presionaron a los entonces jefes del Ejército y de la Fuerza Aérea para ascender de forma irregular a cinco militares que laboraban cerca del presidente peruano. Al final los ascensos no se produjeron, pero la fiscalía considera que podrían haberse cometido los delitos de abuso de autoridad y patrocinio ilegal.
La investigación, aún a nivel preliminar, surgió tras una denuncia del ahora exjefe del Ejército José Vizcarra, quien dijo en noviembre que recibió presiones de los entonces secretario presidencial, Bruno Pacheco, y ministro de Defensa, Walter Ayala, para ascender a militares cercanos al gobierno.
Existen otras tres investigaciones preliminares en las que otros fiscales podrían llamar a declarar a Castillo en calidad de testigo, de acuerdo con expertos.