Fiscales defienden residentes barrios «calientes»

Fiscales defienden residentes barrios «calientes»

POR DIEGO PESQUEIRA Y TANIA HIDALGO
Ocho fiscales adjuntos representantes de fiscalía barriales en sectores denominados «calientes» en la capital defendieron ayer la integridad, seriedad y honradez de la mayoría de los hombres y mujeres de esos barrios, incluidos los policías de servicio y expresaron que trabajan en coordinación para enfrentar al «grupito» de delincuentes que intranquilizan la sociedad.

Los fiscales de Capotillo, Gualey, Los Guandules, Villas Agrícolas, Cristo Rey, Villa Consuelo, María Auxiliadora y San Carlos, coincidieron en que los menores de edad que delinquen y los narcotraficantes representan el mayor problema para las autoridades.

Explicaron que un aspecto que también se debe citar es que los principales consumidores de drogas no son de estos barrios, sino de los sectores denominados “exclusivos”.

Resaltaron que con su trabajo se ha logrado acelerar la administración de justicia, puesto que a través de la conciliación, evitan que miles de casos lleguen a los tribunales.

Los fiscales participantes en el Diálogo Jurídico de HOY fueron Demetrio Ramírez, Gualey; Carlos Vidal, Los Guandules; Carlos Calcagno, Capotillo; Rafael Brown, Villas Agrícolas; Carlos Hernández, Cristo Rey; Dante Castillo, Villa Consuelo; José Miguel Mejía, María Auxiliadora y Máximo Rodríguez, ensanche Quisqueya.

Negaron que esos sectores sean territorios dominados por delincuentes como se ha publicado en distintos medios de comunicación, tras afirmar que la Policía hace un excelente trabajo para mantener la paz y proteger vidas y propiedades.

Dijeron que en estos sectores existen los mismos problemas que en otras zonas del país, tales como robos, drogas y posesión de armas, pero que se trabaja para frenar el auge del crimen organizado.

Se quejaron porque entienden que tradicionalmente sólo se les lleva represión a los moradores y ninguna actividad productiva y recreativa.

Indicaron que se ha demostrado que la violencia no se puede contrarrestar de manera directa con violencia, sino que se requiere de prevención, por lo que reclamaron mayor presencia policial en ese sentido.

Entienden que la sola presencia de un policía en una esquina, sin tener que disparar un tiro ni meter preso a nadie, evita la comisión de crímenes y delitos.

Llamaron a los medios de comunicación a visitar estos barrios entre las 6:00 y 8:00 de la mañana, para que observen la inmensa cantidad de hombres y mujeres que salen de sus hogares y se dirigen a distintos centros de trabajo, universidades, escuelas e institutos de estudios.

Sostuvieron que esto es una muestra de que las personas de bien representan más del 90% de los habitantes de estos sectores, razón por la que no permitirán que la inmensa minoría afecte el desarrollo de esos lugares.

Manifestaron que como se han familiarizado con la forma de vida de las personas que viven en los barrios considerados «calientes», han podido identificar parte de sus problemas, así como las posibles causas.

Coinciden en que el desempleo, la falta de escuelas, de centros deportivos y recreativos, inciden para que los jóvenes incurran en actividades delictivas menores en principio y de mayor peligrosidad con el paso del tiempo.

Afirmaron que en estos barrios se debe vivir la realidad de que los delincuentes están mejor equipados que los propios policías, dentro de los cuales hay hombres y mujeres serios.

CAPOTILLO

De manera particular, el fiscal de Capotillo negó que las calles de este sector sean intransitables para desconocidos, tras afirmar que visitan distintas partes solos y en ocasiones, en compañía del sacerdote.

Calcagno reconoció, empero, que en Capotillo opera el crimen organizado y distintas bandas que se disputan los puntos de drogas, por lo que es de suponerse que cuentan con armas de fuego y con la misión de proteger sus jefes.

Dijo que las versiones de que Capotillo es un barrio impenetrable, contrastan con la gran cantidad de vehículos de lujo y personas de distintos niveles sociales que frecuentan sus calles.

Se dice que estas visitas están relacionadas con la distribución de drogas.

Entiende que el sector Capotillo ha sido olvidado por todos los gobiernos.

Calcagno sugirió que se implemente una verdadera política criminal, tanto en Capotillo como en los demás sectores, a los fines de combatir la delincuencia de manera efectiva.

PADRES: MAYOR CONTROL

Los fiscales opinan que el descuido de los padres en el control de sus hijos es uno de los elementos principales en los hechos de violencia que se producen en los barrios.

Explicaron que no se puede pedir a un niño que crece sin ningún control de sus padres y sin educación, que sea educado y respete las leyes.

«Hay violencia y crimen por el gran descuido de los padres, que además de dejar solos a sus hijos, viven bajo violencia intrafamiliar», precisó el fiscal de Capotillo.

JORNADA POR LA TRANQUILIDAD

Los fiscales anunciaron que en los próximos días darán a conocer al país los detalles sobre una jornada por la tranquilidad de los sectores denominados calientes.

Explicaron que organizarán una serie de actividades deportivas y recreativas de manera conjunta entre los jóvenes de los distintos sectores.

Manifestaron que para el éxito de las actividades contarán con la cooperación de los clubes y juntas de vecinos, lo que permitirá unir en uno solo a todos los barrios.

TRABAJO CONJUNTO

Manifestaron que los policías cumplen su rol en cada uno de los sectores y que hacen su trabajo de manera coordinada con los fiscales.

Calificaron como serios y trabajadores a la mayoría de los policías, aunque admitieron que hay sus excepciones.

Entienden, empero, que la jefatura de la Policía debe implementar mayores programas de capacitación en cuanto a la implementación del nuevo Código Procesal Penal.

Sostienen que cuando los agentes dominen por completo la reforma procesal, habrá una mejor administración de justicia.

VOLUNTARIADOS

El trabajo de las fiscalías barriales es respaldado por distintos voluntariados creados en los mismos sectores para coordinar las actividades y facilitar la interelación entre las autoridades y la comunidad.

En el diálogo preparado por HOY, participaron representantes de los voluntariados, quienes coincidieron en que las fiscalías barriales han sido una salvación para los ciudadanos de escasos recursos.

Resaltó, entre estos, Carlos Betances, de La Ciénaga, quien entiende que los jóvenes de estos sectores «son descarriados», no delincuentes, como se afirma con frecuencia.

También cree que los delincuentes son los grandes desfalcadores del Estado y del sistema financiero nacional.

Para la señora Cristina de Vásquez, las fiscalías barriales representan una prioridad en las comunidades.

Entiende que los policías de servicio son insuficientes para controlar la delincuencia.

Mientras que para Santiago Martínez los delincuentes van muy rápido y los policías muy lentos.

FISCALIAS BARRIALES

Las fiscalías barriales han sido una creación del fiscal José Manuel Hernández Peguero, a los fines de que los ciudadanos puedan accesar de manera rápida y barata a la justicia.

De esta manera, las víctimas no tienen que trasladarse desde el lugar de los hechos hasta la Fiscalía del Distrito Nacional, teniendo la posibilidad de solucionar los conflictos en cada una de las fiscalías barriales.

El trabajo de los fiscales en los barrios ayuda a descongestionar el sistema de justicia.

UBICACIÓN

La fiscalía barrial de Cristo Rey se encuentra ubicada en la calle Ortega y Gasset esquina San Juan de la Maguana, con el teléfono 472-7220.

La fiscalía de Los Guandules se encuentra en la calle San Francisco esquina Francisco del Rosario Sánchez, con el teléfono 536-0878.

La fiscalía de Capotillo se encuentra en la calle Josefa Brea, número 298, próximo a la General Sucre, con el teléfono 684-7277.

La fiscalía de Villas Agrícolas está en la Diagonal Segunda esquina Félix Evaristo Morales, con teléfono 245-0774.

La fiscalía de Gualey-Los Guandules está en la calle Interior I, con teléfono 684-7275.

La fiscalía de María Auxiliadora está en la calle Barbarín Mojica esquina Teniente Amado García, con teléfono 689-7087.

La fiscalía del ensanche Quisqueya se encuentra en la José Tapia, número 209, con el teléfono 549-3999.

ESTADÍSTICAS

Las estadísticas de las distintas fiscalías barriales reflejan que la violencia intrafamiliar encabezan las infracciones registradas, lo que confirma el origen de los problemas.

A manera de ejemplo, presentamos las estadísticas de la fiscalía barrial de Los Guandules desde septiembre del 2004 a mayo del 2005.

En este período se registraron 986 casos, de los cuales 247 estuvieron relacionados con violencia física contra la mujer, lo que representa el 25%.

Por amenazas se reportaron 126 casos, 67 por agresiones físicas, 72 por robos simples, 70 por robos con roturas de noche, 31 atracos, 33 problemas entre vecinos y 340 casos variados.

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