Si William Shakespeare hubiera contado en la época de oro del romanticismo con herramientas tan   completas como las plataformas de Internet, no habría  tenido que provocar el   suicidio a la pareja más romántica de la historia: Romeo y Julieta, por las rivalidades de los  Montesco y los Capuleto, pues habrían podido mantener tranquilamente su romance de  forma virtual.

Quienes sí contaron con el Internet  como cómplice para iniciar su historia de amor    fueron  Elizabeth Suárez (Loly)   y Juan Manuel Erauntzetamurgil (Juanma) una pareja que a propósito del Día de los enamorados le abrió las puertas de su corazón a ¡Vivir! para dar   testimonio de que a través de la Web se puede encontrar a alguien muy especial que puede convertirse en el amor de su vida. 

Loly se adelanta a contar con evidente emoción cómo fue ese primer click que le cambió sus vidas: “Todo se dio por casualidad,  tengo una amiga que precisamente por yo tener tanto tiempo soltera me convence de visitar una página web donde se interactúa con   personas y ahí inició todo”.

Juanma, en  San Sebastián España, también contó  con un amigo que se vistió de cupido y lo invitó a  entrar al web-site donde por cosas del destino una rubia muy risueña sobrada en simpatía  le dijo ¡hola!.. Y fue  en ese preciso momento cuando la vida dio un giro tan grande que lo trajo a residir a República Dominicana, país que nunca había visitado.

“Llevaba dos años soltero y pese a que no estaba muy involucrado con esto de la tecnología accedí a la “cita cibernética” y este fue el resultado”, cuenta, un español que se dejó seducir por la calidez de los dominicanos que encontró a través de “Lolita”, como él cariñosamente le dice.

Dejarlo todo por amor.  Es fácil pensarlo y hasta decirlo, lo difícil es cumplirlo, Juanma lo hizo y cuenta que se siente muy orgulloso por que lo hizo por amor.

“Vendí todo, dejé mi país para emprender junto a Loly lo que hoy es nuestra empresa Impresiones Indar Graf y por su puestos  una vida juntos”.

Loly  ¿Qué encontró en un hombre que solo veía por la pantalla del computador?  Bueno… (risas), yo vi una foto de él en ropa de ejercicios y me asombró  porque  era tan grandote y buenmozo. Y Luego pues su sinceridad.

Juanma   ¿Qué encontró diferente en Loly?  Esa mujer que no había visto en Europa: emprendedora, que  logró salir adelante con su hijo sola, trabajadora y, por supuesto, bonita.

Una práctica en ascendencia.  Como ellos miles de personas en el mundo se cansan de buscar el amor a su alrededor y se arriesgan.

Y es que las páginas webs de contactos y citas en la Red, han dejado de ser un medio de minorías para descubrir el “alma gemela”, y se han convertido en uno de los recursos más utilizados en el terreno amoroso.

Su funcionamiento es sencillo: el usuario “cuelga” en esos sitios su perfil,  características, intereses, gustos personales y otros contenidos, como “anzuelo” para atraer la atención de  personas afines, con las cuales puede entrar en contacto a través del correo electrónico o del chat “en línea”. Si todo va bien se pasa a la charla por teléfono y finalmente al encuentro en persona.

Como sucedió con  Loly y Juanma, quienes aseguran que después de que se pusieron en contacto en serio cerraron sus perfiles, para no conocer más personas en la Web.

El primer encuentro físico.  Loly y Juanma se conocieron en la Web en febrero del 2007  y en persona tres meses después, en mayo, tiempo en el que aprovecharon para preparar los detalles de su boda que fue en septiembre de ese mismo año y ¡Colorín colorado este cuento se ha acabado!

2007 el año de Loly y Juanma

“La felicidad por cable”

Según cuenta esta  pareja, a la semana de haber tenido ese primer toque de ratón y esos primeros toques de teclado, ya habían intercambiado teléfonos. Se llamaban a sus casas y hablaban con sus hijos y familiares. A pesar de los peligros constantes a los que se exponen quienes se relacionan por Internet, Loly y Juanma confiesan que no sintieron temor nunca, pues usaban la cámara y además siempre trataron de ser lo más transparentes posibles. Coinciden en que como eran adultos el riesgo de manipulación disminuye.

Internet ofrece la posibilidad de encontrar el amor verdadero siempre que se utilice esta herramienta con honestidad y sinceridad, es decir, como siempre demanda el amor. Ciertamente es una puerta estupenda al alcance de todos que se puede usar desde el salón de tu casa sin necesidad de acudir a un bar de copas y pasarte los teléfonos de contacto.

Deja los prejuicios fuera

¿Qué diferencia hay entre conocer a su pareja en una discoteca, un viaje, una reunión de amigos, el trabajo, la universidad o la biblioteca, o llegar a ella a través de Internet? Aprovecha las nuevas tecnologías, que ofrecen posibilidades impensables hace poco, desde operar a un paciente “a distancia” por medio de robots. Los prejuicios, chistes y asociaciones negativas sobre las relaciones online, están perdiendo terreno ante la creciente cantidad de personas que se unen por ese medio de intercomunicación.

Y nuestras musas de hoy, Día de San Valentín, dan fe de que sí se puede por la Web.